Gijón fue protagonista en el capítulo de "Top Chef" emitido ayer en Antena 3. En concreto, la zona verde del Museo del Pueblo de Asturias mostró sus encantos, con numerosos planos aéreos exhibiendo el esplendor del lugar. Allí cocinaron los cinco concursantes que seguían vivos en el duro programa presentado por Alberto Chicote: Víctor, Melissa, Montoro, Rakel y Richard.

La prueba tuvo como protagonista un producto de Asturias: la castaña. Y precisamente a castañazos se anduvieron algunos concursantes, sobre todo Víctor, manteniendo siempre una autoestima tan alta que raya con la prepotencia, y Rakel, que no se achica ante las andanadas del chef de origen peruano. Tenía el privilegio Víctor, ganado en la primera prueba del concurso, de paralizar dos veces durante cinco minutos a los rivales que quisiera durante el cocinado en la prueba celebrada en Gijón, además de poder usar las castañas ya peladas.

Y no crean que Víctor se anduvo por las ramas: las dos veces paralizó a su gran enemiga, Rakel. "Me cae muy mal y quiero que pierda", confesó sin ningún reparo.

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El rodaje del capítulo de "Top Chef" en el Muséu del Pueblu d'Asturies de Gijón

Pero también fue un día de reencuentros. Los concursantes cocinaron junto con sus madres, a excepción de Rakel, que lo hizo con su tía. Asimismo, otros parientes ejercieron de jurado, por lo que Gijón sirvió de escenario para los reencuentros familiares.

Pero uno de los abrazos fue especial. La madre de Víctor, Cremilda, de 82 años y llegada desde Perú, vio por primera vez en persona a la mujer de su hijo. El momento en el que se abrazaron la peruana y su nuera fue el de mayor emotividad de la prueba celebrada en Gijón, donde primaron más los castañazos.

Porque Gijón fue el escenario en el que se terminó de romper la buena relación que mantenían las únicas dos mujeres que siguen en concurso: Rakel y Melissa. Esta última lo dejó bien claro al alegrarse de que Víctor castigase dos veces con la paralización a Rakel: "Me parece perfecto que le haya dado los dos comodines, mientras no me los dé a mí...", indicó Melissa.

Precisamente Rakel fue la que hizo un plato más asturiano, al decidir integrar las castañas en unos tortos y apostar también por el queso. Aún así no tuvo buen resultado su plato y el ganador fue Montoro después de una deliberación del jurado que tampoco anduvo exenta de castañazos. Los familiares de los concursantes valoraron sus creaciones sin saber cuál era de cada uno y algunos no se cortaron. Mención especial para la mujer de Víctor, implacable en sus críticas aunque, curiosamente y sin saber que era de él, fue más dura con el plato de su marido.

Montoro salió triunfante de Gijón y se ganó la inmunidad para la última prueba, celebrada ya en las cocinas de "Top chef" y en la que cayó eliminado el andaluz Richard.