Más de sesenta obras que ofrecen un itinerario de la pintura de Marcos Tamargo (Gijón, 1982) desde 2013 hasta ahora mismo. Es el número de piezas de "Anábasis", título de resonancias clásicas para la exposición que el autor inaugurará el próximo 4 de mayo en el machego Museo de Arte Contemporáneo Infanta Elena, en Tomelloso. Una muestra antológica en la que se reúnen cuadros representativos de algunas de las etapas más importantes en la evolución última del artista: sus estancias en Estados Unidos (Nueva York o Miami), Inglaterra y Kenia (Mombasa).

"El espectador podrá ver lo que han aportado esos distintos viajes a mi pintura", explicó ayer Marcos Tamargo. En "Anábasis", (vocablo con el que el pintor quiere resumir su propia expedición hacia el interior de la pintura y de sí mismo), se incluyen cuadros de gran formato (los hay de tres metros por tres metros) y una serie de los trabajos en papel que tanta importancia tienen en la obra del pintos gijonés.

Con motivo de esta exposición, el Museo Infanta Elena ha editado, además, un libro bajo el título "Marcos Tamargo, 2013-2017). Un volumen de 158 páginas que ilustra la evolución de la paleta del pintor en estos últimos años: de los negros o marrones oscuros a la inclusión de tonos mostaza, naranjas, amarillos, ocres o blancos. Él mismo habla de la apertura de sus registros cromáticos: "Bueno, yo creo que mi estancia en Kenia me aportó luz y empecé a hacer una pintura más matérica, aunque siempre desde la fidelidad a mi trabajo".

El pintor subraya también que los seguidores de su pintura podrán ver cómo ha ido incorporando, en los últimos años, una preocupación social inapreciable antes en su obra: "La realidad inmediata ha entrado en mi pintura". "Son una serie de piezas reivindicativas, donde abordo asuntos como el de la emigración", añadió.

Marcos Tamargo ha venido moviéndose en las coordenadas de una abstracción a la que incorpora, cuando lo ve necesario, rasgos o huellas figurativas. Trabaja sobre y con diversos materiales que van del lienzo o la arpillera, a la madera, el serrín, la arena, los cristales o restos vegetales. Son frecuentes, asimismo, sus incursiones en la pintura sobre papel japonés. En "Anábasis" ha optado por exponer alguna de sus piezas tridimensionales, aunque su trayectoria ha estado definida mucho más por la pintura que por la escultura.

No ha sido fácil reunir las más de sesenta piezas de "Anábasis", al pertenecer gran parte de los cuadros a coleccionistas privados. Pintor con mucha capacidad de trabajo (durante años firmó sus particulares retratos de los premiados con los "Principe de Asturias", ahora "Princesa de Asturias"), tiene entre sus patrocinadores internacionales a la casa de pinturas "Winsor & Newton".