No hay duda de que a cualquier persona, sea hombre o mujer, le gusta verse bien y tener buen aspecto, y, en el caso de los hombres, aunque hasta ahora podíamos pensar que se mostraban más reacios a la hora de tomar la decisión, desde el punto de vista estético, de empezar a cuidarse, esa tendencia se está invirtiendo.
La piel del hombre, por lo general, suele ser más gruesa, lo que no quita que también haya pieles masculinas muy finas. Tienen la ventaja de poseer mayor contenido en colágeno, lo que hace que sea más firme y más elástica, y, además, un mayor número de vasos sanguíneos y, en consecuencia, mejor oxigenación.
Pero, a pesar de todo esto y de que normalmente las arrugas aparecen más tarde, el proceso de envejecimiento cutáneo es más rápido que en las mujeres. La falta de cuidados cosméticos de muchos hombres, unido a la agresión que supone el afeitado, hacen necesario que se cuiden tanto o más que la mujer.
Como ya he dicho muchas veces desde aquí, profesionalmente siempre apuesto por la prescripción cosmética personalizada, y en el caso de los hombres resulta totalmente imprescindible. Necesitamos dar a cada piel lo que necesita, buscando el confort de cada uno, y a veces en cosmética masculina se prioriza el confort a la necesidad. No obstante, es fundamental conseguir ambas cosas.
Es importante también fomentar el cuidado de la piel al sol y, en general, ante el medio ambiente. A veces, si no existe un hábito de cuidado de la piel ya establecido, se olvida protegerla del sol. Y no sólo en verano. La práctica de deporte o actividades al aire libre precisa también proteger la piel en cualquier época del año.
Siguiendo mi filosofía de trabajo, como decía, cada caso es diferente y el diagnóstico previo es imprescindible a la hora de determinar qué necesita cada uno.
Los tratamientos más demandados por los hombres:
-Tratamiento de pieles grasas. Son más frecuentes en la adolescencia, pero pueden darse a cualquier edad.
-Eliminación del vello. Cada día es más frecuente que los hombres quieran eliminar el vello no deseado. Normalmente, vello corporal, pero es muy habitual la depilación de zonas faciales, sobre todo el entrecejo y el perfilado de la barba. Buscamos la mejor alternativa para cada caso. La depilación masculina requiere protocolos especiales y es muy importante tener eso en cuenta.
-Tratamiento de grasa localizada, sobre todo a nivel abdominal. Lo más frecuente es intentar eliminar la grasa que es resistente al ejercicio físico.
-Tratamientos antienvejecimiento (flacidez, arrugas). Porque el envejecimiento es para todos, y quien lo desee puede lograr envejecer de la mejor forma posible. Electroterapia, láser, peelings, radiofrecuencia, terapia LED son algunas de las técnicas empleadas.
-Depilación de cejas. Las cejas son fundamentales en la armonía del rostro. Buscamos cejas bonitas, que vayan bien con cada cara, pero que en todo momento respeten la naturalidad.
-Masajes. Los tratamientos de bienestar nos gustan a todos y está claro que no entienden de género.
-Tratamientos de fortalecimiento del cabello. Evidentemente, no conseguimos que salga pelo donde no hay folículo piloso, pero sí fortalecer el existente y estimular el crecimiento del cabello, gracias a la combinación de técnicas como el plasma rico en plaquetas, la radiofrecuencia y lociones capilares.
Aunque sentirse bien y a gusto con uno mismo no entiende de géneros, sí que debemos ser conscientes de las diferencias físicas y psicológicas entre hombres y mujeres, y en nuestro sector esto debe traducirse en adaptar los tratamientos estéticos a las necesidades reales de cada uno.
El hombre de hoy, cuando toma la decisión de cuidarse y acude a un centro estético, debe sentir que entendemos sus necesidades y que las soluciones que los profesionales le vamos a ofrecer están adaptadas a sus problemas reales.
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