Un año y medio después de que el Ayuntamiento apostara por El Cervigón como la playa gijonesa abierta a los perros se prepara una mudanza. El desplazamiento, eso sí, no es muy grande. La idea municipal que ayer se analizó en la comisión de Movilidad y Medio Ambiente es trasladar a los perros del actual tramo del arenal de San Lorenzo, que se corresponde con la escalera 24, a la vecina zona de la playa de la escalera 23.

El objetivo es dar una solución lo más sencilla posible a los problemas de limpieza que se venían detectando en El Cervigón por la presencia diaria de canes. Se entiende desde el Ayuntamiento que a la altura de la escalera 23 la propia acción del mar Cantábrico haría más fácil mantener el arenal en condiciones idóneas para el disfrute de las mascotas y sus dueños.

Por ahora no hay nada definitivo. Entre otras cosas porque se quiere buscar el consenso con los grupos animalistas. De hecho, en la comisión municipal de ayer se quedó en que el equipo de gobierno trasladaría esta idea a Fauna Urbana como colectivo que puso en marcha en 2015 la iniciativa de que Gijón tuviera una playa abierta a los perros durante todo el año.

A la espera de llegar a un acuerdo que pueda hacer efectivo el traslado incluso antes de que comience la temporada veraniega, lo que sí han acordado los concejales de los grupos políticos es colocar en esa zona de San Lorenzo carteles informativos que clarifiquen los derechos, pero también los deberes, de los propietarios de perros que bajan a la playa. Una información que incluirá las posibles sanciones por infracción de la normativa municipal vigente.

IU fue el grupo que llevó al Pleno la petición de habilitar una playa para perros. Fue en septiembre de 2015 y la iniciativa salió adelante por unanimidad de todos los partidos. El expediente administrativo incluyó un escrito de la asociación Fauna Urbana donde se sugerían como ubicaciones, además del arenal del Cervigón, la playa de Serín y la zona oeste de la playa de Poniente. Al final ganó el Cervigón y, tras notificárselo a la Demarcación de Costas, la Junta de Gobierno autorizó su uso para perros todo el año y sin límite de horarios en febrero de 2016.