El polígono industrial de Lloreda, una de las nuevas áreas de expansión empresarial de Gijón con 984.000 de m2, carece de suficiente potencia eléctrica para atender la demanda de las industrias que están instaladas en el mismo más las que están implantándose. La situación puede derivar en el retraso de proyectos de crecimiento de empresas gijonesas que han adquirido terrenos a Sogepsa. Los empresarios ya han mantenido reuniones ante esta situación y algunos sopesan el inicio de acciones legales.
La solución al problema pasa por el tendido de una nueva línea de alta tensión desde la subestación Gijón Norte (ubicada en el Polígono de Mora Garay), actuación que requiere una inversión de entre 2 y 3 millones de euros, explican fuentes empresariales.
EDP ya ha realizado el proyecto para este nuevo tendido de alta tensión y lo ha tramitado ante la Consejería de Industria del Principado. La ejecución de la obra, que se podría prolongar por un año, está pendiente de la firma del convenio entre la compañía eléctrica y la Administración. EDP ya ha informado a empresarios del polígono de Lloreda de la situación, indicando también por carta a una de las empresas que está desarrollando un nuevo proyecto en la zona, que tan sólo les puede garantizar una pequeña parte de la potencia eléctrica que han solicitado contratar a EDP. La imposibilidad de atender su demanda se debe precisamente a las obras pendientes de ejecutar y contratar con el Principado.
Desde Áreas Empresariales de Asturias, asociación a la que pertenece el polígono industrial de Lloreda, se indicó ayer que las dificultades para conseguir la potencia eléctrica necesaria ponen en riesgo la competitividad de las empresas afectadas ante lo que esta asociación "urge al Gobierno del Principado" que garantice el suministro eléctrico al polígono.
Desde Áreas se añade que "se solicitará de forma inmediata información concreta al Principado de Asturias, así como al Ayuntamiento de Gijón, en relación a las obras y plazos correspondientes, que garanticen las demandas de energía de las nuevas empresas instaladas en el parque empresarial de Lloreda".
La empresa más perjudicada por la situación ya cuenta con una factoría en el barrio de Las Maravillas en Tremañes y están ampliando su capacidad productiva con una nueva nave de 5.500 m2 que construye en los 12.000 m2 de terreno adquiridos a Sogepsa. En las nuevas instalaciones la empresa prevé realizar piezas metálicas para el sector del automóvil, entre otros. La inversión en las nuevas instalaciones asciende a 6 millones de euros y la empresa ya ha adquirido la maquinaria. Ahora podría darse la paradoja de que con la obra terminada y la maquinaria instalada la compañía no pudiese poner en funcionamiento la fábrica a principios de 2018, como prevé, por falta de suministro eléctrico.
Aunque esta empresa es la que puede verse más perjudicada, no es la única. Otras ya han adquirido parcelas en el polígono. Aunque aún no han iniciado la construcción de las naves, alguna de estas empresas ya está tramitando la licencia para las obras. Estos proyectos podrían retrasarse.
La potencia que actualmente tiene instalado el polígono ha quedado prácticamente agotada con la construcción de la última factoría, la de una empresa panificadora, que aún no ha entrado en funcionamiento. Empresarios del polígono de Lloreda se han puesto en contacto con responsables de Sogepsa, que les han transmitido su disposición a solucionar el problema. Las fuentes consultadas, sin embargo, albergan dudas ante la situación de insolvencia de la sociedad de gestión del suelo controlada por el Principado.
