El informe del Puerto también considera que los terrenos ocupados por Ebhisa (165.000 m2 a pie de muelle y 160.000 m2 en la explanada de Aboño) no se pueden asfaltar, dado que esa obra obligaría a parar la producción de ArceloMittal y de las térmicas que se abastecen por la terminal: Las empresas dejarían de traer sus cargamentos, dado que la alternativa para asfaltar los terrenos de Ebhisa sería trasladar a la ampliación de El Musel todo el mineral que almacenan. El Puerto lo considera inviable, dado que la ampliación aún no está habilitada para recibir esa mercancía y carece de los medios de descarga y levante del mineral que tiene Ebhisa.

En cuanto al asfaltado de Ebhisa, el coste ascendería a 15 euros por m2, esto es, 4,87 millones de euros, a los que habría que añadir los costes por el traslado del material a la ampliación y los costes para Arcelor y EDP por el levante por camión de sus aprovisionamientos al no poder usar las cintas de Ebhisa (Arcelor) ni el ferrocarril que llega a la terminal (EDP). Las empresas también tendrían que hacer frente a un aumento en el coste de los fletes, al tardar más tiempo la descarga de los barcos con grúas de la ampliación que con pórticos de Ebhisa.

Además, el Puerto sostiene que asfaltar Ebhisa no supone ninguna mejora, debido a que sus parvas están ocupadas de forma constante, dado que a medida que el carbón o el mineral de hierro se levanta hacia su destino final, se vuelven a rellenar con la descarga de otros barcos "de forma prácticamente inmediata" y los viales de circulación están asfaltados. El Puerto señala que en lo que respecta a Ebhisa, el problema está en las parvas, que se están tratando mediante riego con tensoactivos y también, cuando van a permanecer mucho tiempo en el muelle, se cubre con una capa de celulosa para hacer frente a la acción del viento.

El resto de muelles de El Musel o están asfaltados o se van a asfaltar. El Puerto también ha instalado barreras vegetales y de otro tipo en Aboño y en la trasera de Ebhisa.