Algo más de 200 niños menores de tres años no han logrado plaza para el próximo curso en las escuelas de bebés de la red pública del concejo. Pero la saturación de estos centros, demandados por las familias y con previsión de más aperturas en los próximos años, no afecta en todas las zonas por igual. La matrícula de este año evidenció una caída en la demanda de la escuela de Vega-La Camocha, el único centro que pudo admitir a todos los solicitantes e incluso quedó con bastantes plazas libres.

Esa tesitura de baja matrícula es la que ha puesto en peligro la continuidad del centro tal como se abrió en el año 2011, con 39 plazas y tres unidades -un aula de bebés, otra de alumnos de 1-2 años y otra de 2-3 años-. Y, con ello, también se ha activado la alerta entre los responsables municipales, la dirección de la propia escuela y los vecinos de la zona, ya que la Consejería de Educación está valorando la reducción de una unidad, algo que aún no tiene carácter definitivo. La propuesta final, según sostienen desde Consejería, no se concretará hasta dentro de unos días, cuando se traslade al Ayuntamiento para la contratación del personal.

Por el momento la campaña en defensa de la unidad la han liderado desde el centro educativo, desde donde se ha pedido el apoyo de los vecinos de toda la zona rural de influencia para lograr alguna matrícula más que permita consolidar las tres unidades. "Mi experiencia me indica que una vez que se cierra un aula es difícil voler a abrila, por lo que correríamos el peligro de que la zona se quedase sin escuela de 0-3", indica la directora, Nieves Sanz, en una carta que ha hecho llegar a cuantas entidades puedan dar apoyo al centro. Adrián Arias, presidente vecinal de La Camocha, valoró como "una pena" el hecho de que se perdiera el centro, sobre todo en un momento de recuperación de población joven en el entorno.