Germán F. F., el joven de 24 años que recibió una brutal paliza en la madrugada del jueves al viernes en la calle Marqués de San Esteban, permanece estable y en coma inducido. No obstante, el escáner practicado evidencia que el joven presenta "lesiones frontales que le pueden dejar secuelas y está más grave de lo que pensaban los médicos", explica su madre. "Creían que la lesión grave era la de la parte occipital de la cabeza que motivó la caída, pero esta lesión es peor", lamenta la madre de Germán. No obstante, los médicos le han asegurado que "respira bien, está estable y no está sintiendo dolores".

El joven de 24 años, vecino del barrio de Laviada, sufrió una brutal paliza en la madrugada del viernes en la zona de copas de Fomento. La paliza se la propinó un grupo de jóvenes que le provocaron un traumatismo craneoencefálico severo. Este ataque, en el que también resultaron heridos otros dos amigos de la víctima, deja hasta el momento dos gijoneses detenidos -de 20 y 19 años respectivamente-, ambos con antecedentes por lesiones, que ya se encuentran en prisión tras prestar declaración esta mañana en el Juzgado de Guardia. En la investigación que tiene abierta la Policía no se descarta que se puedan identificar a más implicados.

La paliza tuvo su origen en un desencuentro, a priori sin mucha importancia, en un establecimiento de ocio nocturno de los soportales de la calle Marqués de San Esteban, en la esquina con Felipe Menéndez. El joven que ahora está en coma y varios amigos fueron increpados en el interior del mismo por otro grupo de chicos. El "pique" prosiguió cuando se dispusieron a cambiar de bar. Uno de los miembros del grupo agresor obstaculizó el paso a otro amenazándole, según los testigos, con "esperarle fuera". Unas palabras que los agredidos no quisieron tomar en consideración. Hasta que ya en la calle llegaron los golpes, provocados por varios individuos, en diferentes puntos de la calle.