Felipe Aller Celemín, socio del Grupo Covadonga muy crítico con la actual directiva, ha reclamado que la próxima asamblea de la entidad, que tendrá lugar el miércoles que viene, adopte los acuerdos pertinentes con el sistema de voto secreto, en urnas especialmente habilitadas, "para constatar la libre expresión de la voluntad de los socios respecto de los puntos que se sometan a su aprobación". Así lo ha transmitido en un escrito registrado en el Grupo, similar a la petición que hizo para la anterior asamblea grupista.

Aller Celemín asegura que "no es un capricho", sino que se trata de "evitar que quien expresa su voto se vea comprometido en el ejercicio de derecho social, y es imposible lograrlo de otra forma". "La realidad de las presiones e incluso de toda suerte de coacciones abogan por la necesidad de respetar el secreto del voto", sostiene. Hasta ahora, las votaciones en el Grupo Covadonga se han realizado a mano alzada con carteles.