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FÉLIX BARAGAÑO | Presidente de la Cámara de Comercio de Gijón, Langreo y Carreño, que acaba de cerrar la Feria Internacional de Muestras de Asturias

"La demanda del sector del automóvil es grande, se hará más atractiva su zona en la Feria "

"El nivel de satisfacción de los expositores en el recinto de este año es entre alto y muy alto, por las ventas y por el negocio que hacen a posteriori"

Félix Baragaño, ante un cartel de la Feria de Muestras. MARCOS LEÓN

Félix Baragaño preside la Cámara de Comercio de Gijón, Langreo y Carreño, que acaba de cerrar la 61 edición de la Feria Internacional de Muestras de Asturias (FIDMA). Señala que en la Cámara están contentos "porque vemos a los expositores contentos y eso quiere decir que el objetivo de dinamizar a nuestro entorno empresarial se ha cumplido. Es nuestra mayor satisfacción y nuestro orgullo también". Señala que en esta edición le ha ido bien hasta al sector de la construcción, con la venta por un expositor de varios pisos en sus edificaciones de La Calzada y de Nuevo Roces.

-Las ferias son un termómetro de la actividad económica. ¿Conclusión tras esta edición?

-Ya veníamos con una linea ascendente desde 2015. Y este año, por lo que nos dicen los expositores, el nivel de satisfacción es entre alto y muy alto, no sólo por las ventas, si no por el negocio que se desarrolla a posteriori, con los contactos con clientes que han hecho en la Feria.

-¿La recuperación económica ha llegado al consumidor?

-Yo creo que sí, que la gente va perdiendo un poco el miedo. No obstante, no es cierto que la recuperación sea general. Hay ciertos sectores y ciertas actividades que les cuesta salir adelante. La situación postcrisis es distinta a la precrisis. A los negocios que han sabido adaptarse y que han buscado diferenciaciones les va mucho mejor que a los que se limitan a mantener lo que había y piensan que tiene que volver a reproducirse la situación anterior. La gente que va mejor es la que ha buscado nuevas fórmulas.

-¿Tiene que innovar la Feria?

-A la Cámara no nos corresponde innovar, el que trae la innovación es el expositor.

-¿Para la próxima edición se plantean alguna redistribución de espacios?

-La demanda que tenemos del sector del automóvil es altísima. Estamos dando vueltas a ver si podemos buscar fórmulas de redistribuir mejor los espacios, que sean más atractivos, con mejor aprovechamiento y acceso más fácil a todas las marcas. Me refiero a la zona que queda a la derecha de la entrada principal.

-¿Prevén concentrar todas las marcas?

-No, pero sí que esa zona donde está el grueso del automóvil tenga más visibilidad. Hay marcas que ocupan otros espacios y que no quieren cambiar.

-¿Veremos más cambios?

-El Ayuntamiento de Oviedo ya ha manifestado su interés por hacer a medio plazo un pabellón propio. Habrá que ofrecerles un espacio en un entorno próximo a la zona central.

-¿Para el año que viene?

-Quedamos en hablar después de la Feria. No sabemos si su planteamiento es inmediato, pero creo que llevará más tiempo.

-¿Y para cuando la tercera fachada del recinto ferial con una nueva calle por el parque de los Hermanos Castro?

-Primero tiene que estar aprobado el PGO y luego entrar en los presupuestos del Ayuntamiento. Es factible que pueda hacerse en tres o cuatro años.

-En su discurso inaugural hizo un llamamiento a la estabilidad institucional. ¿Lo ve factible con la fragmentación política que hay?

-Los presupuestos son buenos para la ciudadanía, para el desarrollo empresarial y para la estabilidad económica de los ayuntamientos, autonomías y el Estado. Si no hubiera presupuestos en el Estado, probablemente el desarrollo de España en estos momentos no lo estaría teniendo. Sé que las fuerzas políticas tienen cada una su visión y que la política es compleja. Pero que sea compleja no debe de impedirles ver que la política es el arte de la negociación. Un presupuesto tiene que confeccionarlo quien gobierna, pero el que gobierna tiene que hacer cesiones a los demás que permitan aprobar el presupuesto Lo que nos cuesta entender a los empresarios son las situaciones de bloqueo. Lo que no entiendo es el no por el no; eso es la antipolítica.

-¿Y cuáles son las prioridades para los empresarios?

-Los empresarios siempre estamos pidiendo infraestructuras adecuadas. Para nosotros es clave la Variante de Pajares, para poder llegar a Madrid en dos horas y cuarenta minutos.

-Pues parece que van a tardar 12 años en habilitar los túneles, más tiempo del que llevó perforarlos.

-Eso me parece un disparate. Con el esfuerzo que se ha hecho, lo que queda ahora es una nimiedad. No entiendo que se sigan produciendo estos retrasos inexplicables. La Variante es clave.

-¿Qué más demandan?

-Vuelos a Madrid, baratos y frecuentes, la autopista del mar y que no nos pongan pegas que impidan el desarrollo empresarial.

-¿Habla de burocracia?

-Sí. Me refiero, por ejemplo, al gravísimo problema de las licencias y autorizaciones. No se puede tardar años en dar licencias y en hacer informes medioambientales. Una empresa tiene que tener claro cuál es la legislación que debe de cumplir, pero al día siguiente la administración tiene que decirle "adelante" y cuando acabe el proyecto, hacer la comprobación. La sensación que hay muchas veces es la contraria; que cada vez que vas a pedir algo a la administración te conviertes en sospechoso de incumplimiento. Yo creo que debería de ser lo contrario, que la administración te reciba con los brazos abiertos. Los empresarios no tenemos ningún problema en cumplir la normativa.

-¿Subvenciones?

-Tienen mucho más sentido los préstamos participativos o los temas de capital riesgo: Si la administración apoya un proyecto y sale mal, todo el mundo perdió, el emprendedor y la administración; pero si sale bien, la administración recupera el dinero que aportó para poder apoyar a otro emprendedor. ¿Qué sentido tiene dar cantidades millonarias a una empresa que luego va bien? ¿Por qué no lo va a devolver y no se va a poder destinar ese dinero a otros proyectos? Las subvenciones a fondo perdido son a extinguir.

-¿Qué objetivos se marca para la Cámara de Comercio?

-Estoy tremendamente orgulloso de lo que se ha hecho en los últimos cinco años que llevo en la presidencia. Me he encontrado aquí con un equipo magnífico y hemos conseguido darle la vuelta a la cuenta de resultados, reduciendo nuestros gastos y mejorando nuestros ingresos en base a programas y formación y a la reactivación del recinto ferial. Mis objetivos son seguir desarrollándo estas actividades, seguir dándole un empujón al recinto ferial. Vamos a duplicar el Pabellón de las Naciones. El Consorcio ya ha dado el visto bueno al anteproyecto y vamos a empezar a desarrollar el proyecto ya. La obra estará hecha para la edición de 2019. Además de un ahorro en carpas, nos va a facilitar poder desarrollar muchas más actividades. El calendario ferial ya nos ocupa una parte de las instalaciones más de 300 días al año y empezamos a tener solapes de actividades. Al duplicar el Pabellón de las Naciones podremos desarrollar varias en paralelo e incluso cuando se haga la calle por el Parque de los Hermanos Castro, con entradas independientes.

-La gestión del recinto ferial supone un buen colchón económico para la Cámara.

-La realidad es que cada vez que vamos a las asambleas nacionales de cámaras todas nos miran con cariño y con sana envidia. Las cuotas obligatorias de las empresas que se pagaban en su día para la Cámara de Gijón no representaban más de un 15% a un 20% de su presupuesto, mientras que para otras cámaras representaban el 60% o el 80%, con lo que ahora mismo están en una situación muy complicada.

-¿Qué opina de la fusión de las cámaras asturianas?

-Creo que sería muy positiva. Hay que buscar fórmulas en las cuales cada cámara mantenga su capacidad y capilaridad en su entorno, pero que en lo autonómico, nacional y europeo tuviesen una voz única. Creo que hay que trabajar para encontrar una fórmula que combine estos modelos y si lo consiguiéramos yo entiendo que una fusión sería buena para los empresarios asturianos.

-¿En qué condiciones?

-Una fusión es una integración; sería una única Cámara de Asturias pero con tres delegaciones y con múltiples subdelegaciones o antenas camerales. Un único comité ejecutivo y una única voz ante las administraciones autonómica, nacional y europea, pero que la voz ante lo local se mantenga en esas delegaciones. Entiendo que somos instituciones centenarias, que hay muchos intereses y hay que ir muy poco a poco, pero en el medio plazo habría que avanzar hacia ello.

-¿Están las cámaras de Oviedo y Avilés en esta clave?

-Cada uno tiene que responder lo suyo.

-¿Si a la Cámara que está saneada le parece bien, que objeción pueden poner las que tienen apuros económicos?

-Ésa es una falsa apreciación. Tanto las cámaras de Oviedo como de Avilés son muy solventes. La de Oviedo tiene un gran patrimonio y un balance muy potente. Efectivamente, en lo que ha pinchado es en la cuenta de resultados en estos últimos años y estamos seguros de que poco a poco irá equilibrándola. La de Avilés es una Cámara mucho más pequeña a la que le ha sido más fácil equilibrar su cuenta de resultados porque tenía una estructura pequeña y un patrimonio importante, que le permite tener ingresos y rentas. Yo no veo en dificultades ni a una ni a la otra. Si se produce la integración de las cámaras será por convencimiento, no por ningún otro motivo.

-¿Qué necesitan los empresarios asturianos para adscribirse voluntariamente a las cámaras, con muy pocos asociados?

-Estamos en un modelo nuevo que se acaba de crear en base a una nueva ley y no ha habido tiempo todavía para que los empresarios conozcan la nueva situación. Comparar las cámaras con las asociaciones empresariales, que llevan muchos años y tienen unos asociados consolidados, es un poco injusto, porque unos llevan muchos años de trayectoria mientras las cámaras se enfrentan a una nueva situación. Hay que ser consciente de que ya no existe ninguna obligación de pagar a las cámaras, que tenemos que convencer a las empresas para que se asocien por los servicios que vamos a darles a cambio, como formación o certificados a origen para las empresas que exportan. Una de las empresas que más cuota paga en la Cámara de Gijón compensa con creces la cuota cameral con los descuentos que le hacemos en los certificados, por estar asociada.

-En otros países las cámaras gestionan puertos y aeropuertos. ¿Un camino a explorar?

-El modelo cameral está mundialmente extendido y lo auténticamente potente es la marca Cámaras. Sin embargo, en cada país esa realidad es distinta. Yo veo casi imposible intentar avanzar en España hacia el modelo de países en los que las cámaras gestionan puertos y aeropuertos. Todos esos desarrollos tendrían que ir ligados a cambios de legislación. En Italia, por ejemplo, cada vez que hay un litigio, los que se confrontan están obligados por ley a ir a una mediación previa al proceso judicial, labor que se ha otorgado a las cámaras de comercio. Sí veo fácil avanzar en España en cuestiones como la formación, como ya se hace en Alemania, donde los títulos de formación dual los otorgan las cámaras de comercio, que son las intermediarias entre los centros de formación y las empresas donde los alumnos hacen las prácticas.

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