El jabalí arrasó hasta el pasado mes de octubre prados y huertas de la zona este del concejo por valor de 12.958 euros. Se trata de la cuantía más elevada registrada en los últimos seis años, según las estadísticas de la dirección general de Biodiversidad. En concreto, las indemnizaciones del Principado aumentaron en 1.434 euros con respecto a 2016, lo cual evidencia la presión que está ejerciendo la especie sobre la zona rural, tal y como denuncian los vecinos. Entre las parroquias de Deva y Porceyo, los suidos encuentran una buena despensa de patatas, manzanas, maíz y fabas, que también destrozan en busca de alimento. Los cazadores y los guardas del Medio Rural abatieron desde enero un total de 53 ejemplares, ocho de ellos procedentes del casco urbano.
La mayor parte de estos datos son ya conocidos por el equipo de gobierno municipal, que ayer celebró el primer foro de debate sobre la superpoblación del jabalí en cumplimiento de una propuesta de Xixón Sí Puede, aprobada en el Pleno de noviembre. A esa reunión asistieron una treintena de personas, entre representantes de Tráfico, Policía Local, Guardia Civil, la oficina de Bienestar Animal, el servicio de Medio Ambiente, el Colegio de Veterinarios y casi todas las asociaciones de vecinos de la zona rural. Por contra, destacó el concejal forista Esteban Aparicio, no acudió ningún grupo de la oposición, pese haber apoyado la iniciativa. "La próxima reunión se convocará para principios de año, una vez recibamos el plan específico de control poblacional que están elaborando la Universidad de Oviedo y el Principado de Asturias", explicó Aparicio.
El equipo de Carmen Moriyón busca así una solución a la plaga urbana del jabalí, como ya hizo Oviedo, atendiendo a las quejas vecinales. El plan, concreta Esteban Aparicio, "va encaminado a incrementar las batidas en el ámbito urbano y en la zona rural productiva". "Los expertos nos han comentado que otras medidas como la esterilización de hembras no son efectivas, así que estamos a la expectativa de recibir el documento final y ver las medidas que nos proponen", abunda el edil. Una de las actuaciones que se plantean es cazar ejemplares en las zonas de refugio.
Según fuentes de la consejería de Infraestructuras, Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, este año se llevan abatidos en el concejo de Gijón 53 suidos, 20 de ellos por parte de la Guardería del Medio Natural y el resto por cazadores de los cotos regionales de Llanera y Cordal de Peón. Entre los datos más llamativos destaca que ocho jabalíes fueron eliminados como resultado de los "perreos", técnica que consiste en utilizar perros para ahuyentar a los suidos hacia los cotos. Los ocho ejemplares se encontraban en la zona de seguridad de Gijón -la segunda más grande Asturias con 9.336 hectáreas- en la que está prohibida la caza, por lo que el empleo de canes fue fundamental para evitar ataques en la ciudad. La actividad, supervisada por los guardas y permitida sólo en los días en los que están programadas batidas en los cotos colindantes, está autorizada hasta finales de año, aunque el Principado tiene previsto continuar con ella en 2018.
Las estadísticas de la dirección general de Biodiversidad revelan que las parroquias más castigadas por la plaga del jabalí son Somió, Cabueñes, Deva, Caldones, Baldornón, Fano, Bernueces, Santurio y Vega, todos ellos próximos a Villaviciosa. La zona este es sin duda la más afectada, aunque este año los ataques de suidos llegaron hasta Porceyo y Veriña. Como métodos de control, Medio Ambiente permitió este año en el municipio aguardos, recechos diurnos y nocturnos y batidas, mediante resoluciones con fecha 28 de febrero y 7 de marzo.
Con respecto a los daños, desde enero hasta octubre, la consejería de Medio Ambiente lleva pagados 12.958,24 euros correspondientes a 44 expedientes. La mayoría de ellos son destrozos en prados, aunque también se contabilizan daños en huertas en Veriña y Leorio, en cultivos de patatas en Pedrera, en manzanos en Cabueñes, en fabas en Baldornón y en maíz en Granda. Asimismo, hubo un ataque a ovino en Vega el pasado enero. Aunque la cuantía de las indemnizaciones aumentaron considerablemente con respecto a años anteriores -en 2012 por ejemplo se pagaron 9.107,95 frente a los 12.958,24 euros de este año-, no pasa lo mismo con el número de expedientes, que descendieron: 44 en lo que va de año, mientras que en 2016 fueron 56, y en 2015, 64. De estos datos se puede deducir que los jabalíes, al aumentar en población, actúan ahora en grupo.
