La familia de Germán Fernández, el camarero gijonés brutalmente agredido el pasado mes de junio en Fomento, ha compartido en las redes sociales una imagen del joven en su comida de Navidad en el centro sanitario de Barcelona donde intenta recuperarse de sus graves lesiones. "Así os desea feliz Navidad, es un crack" es el texto que acompañan a la imagen de Germán delante de la comida. Al fondo, una cama llena de peluches. Su madre, Yolanda, ha contando cómo se gestó esa imagen, en la que Germán muestra sus avances ante todos sus seguidores de la página "Todos somos Germán", para demostrar la capacidad de lucha de su hijo y su orgullo de madre.

"Deciros que Germán va. Nos trajeron la comida de Navidad y le digo ¿hacemos una foto para la página? Y me dice si pero lo mejor es que me toca el brazo y me dice con señas espera... y mirarle la mano. Es un crack. Ese es mi Ger con sus picardías", cuenta Yolanda. Germán tiene en su mano una botellita de vino aunque lo que hay junto a la comida a medio beber es una botella de agua mineral. La familia también ha compartido una imagen de un paseo en coche del joven para celebrar las fiestas navideñas. Su madre y su hermana Marina están junto a él ayudándole en su recuperación.

Germán Fernández llegó a Barcelona a mediados del pasado mes para poder avanzar en su rehabilitación. Desde la agresión en verano había estado internado en el Huca. A lo largo de los meses ha ido acumulando muestras de apoyo de muchos gijoneses pero también de cantantes famosos como Jaime Urrutia y Coque Malla y de Quini, que fue a visitarle en persona aprovechando un viaje del Sporting a Barcelona.