Imad A. -el joven de origen marroquí que se encuentra en prisión preventiva por su supuesta implicación en el "caso Germán"- declarará esta mañana en el Juzgado de lo penal número 1 de Gijón acusado de romperle la mandíbula a un menor de edad de un puñetazo tras una agresión cometida, también, en la zona de Fomento, a las puertas del mismo local en el que comenzó la trifulca que acabó con el joven Germán Fernández en el hospital.

Esta agresión ocurrió dos meses antes que la del camarero gijonés. A las tres de la madrugada del 21 de mayo de 2017, Imad A. -en compañía de otros menores de edad- asaltó a su víctima, nacida en 2000, propinándole varios puñetazos que le provocaron un traumatismo facial con rotura de mandíbula por el que tardó en curar 88 días. También presenta secuelas por la agresión como material de osteosíntesis en rama mandibular derecha, ligera desviación y limitación de apertura bucal y fractura parcial de un diente.

El Ministerio Fiscal le atribuye un delito de lesiones con la agravante de abuso de superioridad e interesa una condena de dos años de prisión a sustituir por ochos años de expulsión del territorio español. Además del abono de las costas, también le piden 4.000 euros de indemnización a la víctima por los daños y otros 7.000 euros por las secuelas, también los gastos médicos derivados que ascienden a 1.486,65 euros. De ser condenado serviría esta pena como antecedente penal de cara al juicio por el "caso Germán" que sigue en instrucción.

Imad A., de 18 años, tiene además otras dos causas pendientes por agresión y suma una condena por un delito leve de lesiones.