El presidente de la Federación de vecinos de la zona rural "Les Caseríes", Manuel González-Posada, se reunió ayer en Oviedo con el viceconsejero de Medioambiente del Principado, Benigno Fernández Fano para solicitar al gobierno regional un mayor control de la población de jabalíes.

En la reunión, en la que también estuvo presente Rocío Vega, presidenta de la Federación de asociaciones de vecinos de Villaviciosa, González-Posada pidió al Principado "que coja de una vez el toro por los cuernos". Para el representante vecinal, "éste no es un problema que afecte solo a la zona rural de Gijón, también los sufren en Villaviciosa y todo Asturias", por lo que pide al gobierno regional "que actúe de una vez".

Para González-Posada, es una prioridad acabar con el problema de los suidos. "Los tenemos por todos los lados, no los tenemos debajo de la cama de milagro", aseveró. Para ello, el representante vecinal sugirió al viceconsejero de Medio Ambiente "mayor libertad para cazar. Que los cazadores puedan matar más ejemplares. No queremos esquilmar a los jabalíes como a los osos o al urogallo, pero tiene que haber una reducción severa de su población", analizó.

"El problema de los jabalíes se nos está yendo de las manos", arguyó González-Posada, "no dejan de multiplicarse y su población sigue creciendo". Para el representante vecinal de la zona rural, "los jabalíes hacen mucho daño, sobre todo en el aspecto económico. Destrozan cosechas que cuestan mucho dinero a los habitantes de la zona rural, es un descontrol". La última de las quejas, la que propició que solicitara esta reunión a la consejería, provino de los vecinos de Quintueles.

Desde el Principado "se comprometieron a estudiarlo", afirmó resignado González-Posada, "pero dicen que primero hay que hacer un protocolo, la palabra mágica", por lo que, enfatizó, "siempre son todo muy buenas palabras, pero muy pocos hechos, y este problema hay que atajarlo cuanto antes", concluyó.