Un millar de árboles autóctonos ya crecen en el Monte Deva. Niños de todas las edades plantaron ayer abedules, robles y cerezos en una zona deforestada, tras la tala de eucaliptos. Muchos de estos ejemplares fueron los que se llevaron los más pequeños en Navidades de la feria de Mercaplana. La plantación del nuevo bosque, bautizado como "La Viesca, La Olla-Monte Deva", se convirtió ayer en una fiesta. Además de la repoblación de árboles, hubo degustación de sidra y presencia de personajes mitológicos, que divirtieron al público infantil. En la actividad también participaron miembros de la Asociación de Vecinos de Deva, la Policía Local, Protección Civil, trabajadores de Emulsa y EMA, y la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón.