Un joven de 28 años ha sido detenido este fin de semana después de amenazar con una navaja a otro joven que quiso acariciar a su perro. Los hechos sucedieron alrededor de las siete de la mañana del sábado en la calle Marqués de San Esteban, cuando un joven en estado ebrio quiso entrar en un local de ocio. El controlador de accesos del establecimiento, que conocía al cliente por su carácter conflictivo y por haber tenido problemas en otros bares de la zona, le negó la entrada en su local provocando su enfado y que hiciera ademán de sacar alguna arma de entre sus ropas. Finalmente desistió de hacer efectiva su amenaza y tiró al suelo con fuerza un vaso de cristal que llevaba en la mano.

Este cliente llevaba un perro atado a una correa que había dejado momentáneamente a un amigo suyo para poder entrar en el local. Mientras surgía esta discusión entre el portero y el dueño del perro, otro cliente que estaba fuera fumando un cigarrillo, ajeno al altercado, se aproximó al perro con la intención de hacerle carantoñas y jugar un poco. Este acercamiento molestó al propietario del can, quien enfadado por no poder acceder al local, pagó su frustración sacando un cuchillo y amenazando con él al joven que acarició a su perro lanzándole acometidas con la intención de herirle. Finalmente la víctima fue asistida por el portero del local que evitó más embestidas y puso en fuga a agresor.

Los agentes del Grupo de Atención al Ciudadano de la Policía Nacional de Gijón localizaron al autor de las amenazas pocos minutos después en la plaza del Instituto y le intervinieron el cuchillo. Opuso mucha resistencia y causó daños en el vehículo policial. El arrestado tenía antecedentes policiales por tráfico de drogas y robo.