â€?â€?En la iglesia de La Calzada ayer no sólo hubo sermón, sino también cánticos, bailes y hasta aplausos. La aclamación la pidió la vecina Berta Vázquez para festejar las bodas de plata del templo de Nuestra Señora de Fátima. Subió al púlpito justo antes de finalizar la misa y dijo ante una multitud de fieles: "Antes teníamos una iglesia que parecía un barracón, pero que a nuestros ojos era la más bella catedral del mundo". En 1993 el barrio levantó una nueva construcción sobre los cimientos de la anterior. A ella "trajimos los afanes de cada día, el Evangelio en la mano y la ilusión en el corazón". Veinticinco años después, "seguimos dando pasos, adaptándonos a los nuevos tiempos". Berta recibió la ovación del público y del arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, que presidió una emotiva eucaristía.

Aunque técnicamente el templo no cumple los 25 hasta el 20 de junio, ayer, fiesta de Fátima, La Calzada celebró por todo lo alto su aniversario. El adelanto se debió a la apretada agenda del Arzobispo, que, aún dolorido de la rodilla por una caída de montaña, no quiso perderse el cumpleaños de "la casa donde Jesús vive en La Calzada". Venía Sanz Montes de oficiar comuniones en El Cerillero para encontrarse en Nuestra Señora de Fátima también con niños sentados en primera fila. A ellos se dirigió para preguntarles: "¿Dónde está Jesús entre nosotros?". Los pequeños levantaron la mano y contestaron: "En el sagrario". "Efectivamente, en el sagrario. Los niños del Cerillero me dijeron que en la luz, incluso algunos apuntaron que en las bombillas. Si fuese así entonces Jesús daría calambres", contestó un Arzobispo especialmente cercano y cariñoso.

Las canciones del coro de La Calzada invitaban a serlo. Con guitarra en mano y un toque moderno entonaron "Santo, santo, santo es el Señor" o "Gloria, gloria, aleluya". El templo retumbó de notas musicales, nadie quedó sin cantar. "Cuando miraba a estos pequeños -prosiguió el prelado asturiano-, me imaginaba que hace 25 años estaban ahí sentados niños que ahora son adultos. 25 años dan para tanto... Con todos los climas de las cuatro estaciones: frío, sofoco, explosión vivaracha y serenidad". Sanz Montes recordó que lo que allí estaban celebrando "no era el templo, sino las piedras vivas que por aquí pasaron". Un recuerdo especial tuvo, tanto él como el cura Eduardo Zulaiba, para José María Díaz Bardales, que fue párroco de La Calzada desde 1981 hasta su fallecimiento en marzo de 2012para José María Díaz Bardales, que fue párroco de La Calzada desde 1981 hasta su fallecimiento en marzo de 2012. Su busto, en el exterior de la iglesia, fue testigo de la sentida misa.

Las palabras del Arzobispo

"Me uno a vuestra alegría. Y como dice el papa Francisco, toda biografía, toda vida tiene tres momentos como los verbos: pasado, presente y futuro (...). Que esas piedras vivas sigan construyendo algo hermoso y sosteniendo la casa de Jesús en La Calzada", concluyó su homilía el Arzobispo. Antes, el cura Eduardo Zulaiba -llegó en septiembre de 2017- recordó, a través de una exposición de más de cuarenta fotografías, cómo el barrió inició hace 25 años una nueva etapa parroquial en un templo "más espacioso y luminoso". "Felicito a todos los que amamos esta parroquia de Fátima seamos de aquí o de cualquier otro sitio", dijo.

Tras la comunión, llegó el turno de Berta Vázquez, una de las vecinas más entregadas a la parroquia. Sus palabras sorprendieron hasta el arzobispo de Oviedo por su sinceridad y fe. "Tratamos de ser evangelizadores y esperamos seguir siendo útiles. Nuestra cura Eduardo cogió las riendas de esta parroquia con mucha ilusión y deseamos estar a su altura para seguir construyendo una iglesia viva", expresó. Para añadir: "Nos duele el alma al comprobar que ya no están muchas personas. Pese a todo, llegamos hasta aquí siendo una familia. Pido un fuerte aplauso y que vivamos un feliz día". Ovación del público, canción "El 13 de mayo" y despedida de Sanz Montes: "Si quieren quedamos para los 50 años. Hasta entonces".