El consejo de Emulsa, reunido en la tarde de ayer, sacó adelante los tres puntos del día, entre los que se incluía la aprobación del nuevo Plan Integral Municipal de Residuos que regirá la ciudad durante los próximos 5 años, con un gasto estimado de más de 12 millones de euros. También se aprobó la subida de tasas de la empresa municipal, fijada en un 5%, así como el contrato de servicios para la asistencia técnica referida al proyecto europeo Interreg WinPol.

La primera de las votaciones, aunque era meramente informal pues la aprobación del plan de residuos es competencia únicamente en la Junta de Gobierno local, provocó muchas suspicacias. De hecho, únicamente apoyaron la moción los representantes de Foro y Ciudadanos, frente a la abstención mayoritaria y el único voto en contra de Xixón Sí Puede. David Alonso, concejal de la formación morada, ya había avisado por la mañana, en rueda de prensa, del sentido que iba a llevar su voto. "Da la sensación de que Emulsa está tomando una dirección y que desde la parte política no se está hablando de qué modelo de política de residuos queremos. Es preciso contar con un modelo y que posteriormente Emulsa lo solvente a nivel técnico. Lo que no puede ser es funcionar a golpes de timón, por lo que tememos que esta hoja de ruta del Plan de Residuos nos lleve a ninguna parte", aseguró Alonso.

El nuevo plan integral incluye una apuesta clara por el reciclaje de residuos orgánicos, con la colocación de los contenedores marrones que ya funcionan en varios barrios de la ciudad. Igualmente, se situarán en la zona rural una serie de contenedores para residuos vegetales. Además, el nuevo plan incluiría la posibilidad de una recogida puerta a puerta para los grandes focos generadores de residuos como hospitales, colegios o residencias de ancianos.

"Vemos con mucha preocupación el documento que nos han presentado: en él se prevé pasar del 27,4% de reciclaje que se registraba en 2015 al 59,5% en 2020. Porque yo lo valgo. No hay motivos en el plan que nos trasladan que justifiquen esa subida tan pronunciada", valoró el edil, "con estas medidas, como máximo, llegarían a un 35% o 37% de reciclaje en 2020, como se comprueba a través de todas las experiencias europeas que funcionan con contenedores", enfatizó Alonso.

La subida de tarifas de la empresa municipal también causó recelos. Finalmente se aprobaron con los votos favorables de Foro, Ciudadanos, los sindicatos y los vecinos, ante la abstención del resto de grupos y los votos en contra de Xixón Sí Puede y el PP -que abogaba por una subida del 4,7% en vez del 5%.

"Se habló de que la tarifa debería ir de la mano del Plan Integral Municipal de Residuos y de la tasa de reciclaje, y eso no se está haciendo", aseguró Alonso, quien afea que se haya desechado la opción del pago por generación -paga más quien menos basura tira en los contenedores de reciclaje, quien más residuos genera- en favor de una subida lineal, igual para todos los ciudadanos. "Parece que para aumentar los ingresos en el plan económico-financiero deciden subir la tarifa de Emulsa, pero no tiene ningún sentido, ya que no soluciona ni los problemas de Emulsa ni del Ayuntamiento", ya que supondría un aumento en las arcas de alrededor de 580.000 euros. Se da la circunstancia de que, debido a un cambio de la forma jurídica de la tarifa, requerida por la ley de Contratos Públicos, esta pasaría a ser una prestación patrimonial de carácter público no tributario, no una tasa ni un precio público. Por ello, su entrada en vigor podría demorarse varios meses, ya que tiene que someterse a información pública antes de aprobarse en comisión y ser llevada a Pleno.