El pasado mes de mayo cayeron en Gijón 90,6 litros por metro cuadrado, 23,6 litros más de lo normal (67), pero hubo años en los que llovió el doble. Por ejemplo, en mayo de 2008 cuando se registraron 113,2 litros. Estos datos, aportados por el delegado territorial de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Ángel J. Gómez, demuestran que efectivamente las precipitaciones están siendo muy abundantes, sin embargo no más que otros años. Esto último refuerza la idea de la oposición de que "algo más" tiene que haber al margen de las lluvias para que aparezcan con frecuencia manchas marrones.

El análisis puede ser más concreto. Según la Aemet, el sábado 26 de mayo, cuando tuvo lugar el primer vertido, se registraron 43 litros en la estación de El Musel. Fue la precipitación diaria más alta de todo el mes y la mayor en un mes de mayo entre 2001 y 2018. Sin embargo, si se tienen en cuenta todos los meses del año, hay valores superiores: el 10 de junio de 2010 hubo 108,1 litros. De hecho, el valor de este año es el catorceavo más alto de la serie histórica. Por su parte, en los diez primeros días de junio la estación del Musel lleva 69,4 litros, más que el promedio climatológico para todo el mes (50,6). Lo mismo sucede en Viesques, con 95,4 litros.