"La próxima visita será con dinamita". Por esta frase han sido condenados cuatro trabajadores de la cafetería del Real Grupo de Cultura Covadonga -dos hombres y dos mujeres- y el secretario general del sindicato CSI, Ignacio Fuster, como autores de un delito leve de amenazas al pago de una multa de 720 euros después de una protesta tras sus despidos. Los cinco perjudicados recurrieron la sentencia del Juzgado de Instrucción número 2 de Gijón, pero la Audiencia Provincial ha ratificado la multa.

"Estas sentencias son todo un ejemplo de esta justicia con minúsculas que solo ve lo que quiere ver y cómo lo quiere ver, y que forma parte indisoluble de todas esas injusticias con mayúsculas que los trabajadores estamos sufriendo todos los días a todas horas", explican en un comunicado desde el sindicato CSI.

La condena contra los cuatro trabajadores y el secretario general de la CSI se fundamenta en una concentración celebrada el 16 de febrero del año pasado frente a una cafetería de los bajos de El Molinón -la regenta la misma empresa que en el Grupo- para protestar por los despidos. Una de sus consignas fue "la próxima visita será con dinamita", que denunció la mujer del dueño. Pese a esta sentencia -la CSI lo califica como "atropello judicial"- "los trabajadores no nos rendiremos ni nos amedrentaremos ni nos vamos a encerrar en los despachos a rumiar frustraciones ni a llorar por los derechos perdidos; pase lo que pase, desde la CSI seguimos en la pelea contra los despidos y por los derechos de la clase obrera", prometen.