Hay jóvenes sin límites con tal de lograr lo que antes era popularidad y ahora se traduce por seguidores en las redes sociales. A cualquier precio. Es lo que pensaron diez adolescentes -nueve chicas y un varón, todos ellos menores de edad- que se subieron a un coche para comenzar a bailar sobre el techo y el capó y así grabar un vídeo que luego compartieron en internet para hacerlo viral. Su tropelía provocó que acabasen detenidas y más de 1.000 euros de daños en el vehículo utilizado para su baile.
La gamberrada se produjo en la madrugada del 17 de junio, sobre un turismo aparcado en el Centro de Empresas de la Guía. Su propietario, al ir a recogerlo, observó el techo y la carrocería abollados, las defensas delanteras rotas del mismo modo que el lavafaros y la antena. Gracias a su hijo, que le enseñó el vídeo y las fotografías que ya circulaban por internet, aportó pruebas de lo ocurrido a la policía en su denuncia. Eso facilitó la labor de los investigadores, que constataron la presencia de un grupo de jóvenes, la mayoría chicas, que bailaban sobre el techo y luego se dejaban resbalar de pie hacia la parte trasera o delantera del vehículo como si fuese una especie de tobogán.
La mayoría de las implicadas eran plenamente conscientes de que estaban siendo grabadas. No les importaba puesto que su objetivo era subirlo a sus redes sociales y así ganar más seguidores. Con lo que no contaban es con que esas imágenes permitirían a los agentes averiguar su identidad. Poco a poco fueron dando con los supuestos autores de este delito de daños, a los que tomaron declaración en presencia de sus padres y abogados por ser menores de edad. Después pusieron los hechos en conocimiento de la Fiscalía de Menores de Asturias.
Advertencia de la Policía
La Policía Nacional advierte que "este tipo de bromas y excesos pueden ser constitutivas de delitos". Además, recuerda que "la diversión a costa de la burla, ridiculización de las personas o el destrozo de objetos o mobiliaria es responsabilidad de quien lo realiza y no pueden argumentar que se trataba de una simple gracia". Lo que "conlleva consecuencias penales y administrativas".
