A través de este comunicado quiero informar que presento mi dimisión como concejala de Xixón si Puede en el Ayuntamiento de Gijón.

Las continuas y profundas desavenencias con el Grupo Municipal han hecho insostenible mi continuidad en el mismo.

La situación antirreglamentaria que se produce en Xixón si Puede con una ausencia total de reuniones de los órganos democráticos recogidos en el reglamento de la candidatura, motivo por el cual los 4 representantes de la asamblea en la comisión de coordinación presentaron su dimisión el pasado abril, las reiteradas peticiones de que se produzca una asamblea de XsP y su sustitución por una de Podemos, generando una confusión intencionada entre uno y otro espacio, han generado una situación dónde Xixón si Puede es sólo un nombre para un grupo de 6 concejales, pero no es, si alguna vez lo fue, un espacio de confluencia ni una Candidatura de Unidad Popular.

Pero no solamente existen diferencias en el modelo democrático de toma de decisiones, sino también en otras de transcendencia política. En julio de 2017 un grupo de militantes de Podemos elaborábamos el manifiesto "Por un gobierno a la altura de su gente", en el que ya manifestábamos que una lección que los partidos debimos aprender en el 15M fue el clamor mayoritario de que los intereses partidistas no se antepusieran a los intereses de la mayoría y que había que poner freno a la parálisis que sufre la ciudad en manos de un gobierno incapaz de Foro Asturias. Ya por aquel entonces señalamos la necesidad de dar pasos en la construcción de la confluencia con IU a través de la opción de Unidos Podemos, y qué mejor forma de llevarlo a cabo que planteando una moción de censura encabezada por nuestros compañeros de coalición.

En ese momento el ya mermado Consejo Ciudadano no quiso abrir ese debate, y desgraciadamente, casi año y medio después nos vemos en la obligación de reabrirlo, pero en este caso por imposición externa.

Lamentablemente las respuestas que se están dando priorizan cuestiones partidarias y partidistas a las necesidades de la mayoría social de esta ciudad. La nueva política no vino para dar respuestas en clave de lógicas partidarias sino en clave popular y en este momento avanzar en la moción de censura es una necesidad imperiosa para la mayoría social de nuestra ciudad. Llegar a 2019 con la propuesta de Plan Económico Financiero de Foro es comprometer los avances sociales para los próximos años y encorsetar las políticas económicas para un largo periodo.

Soy de la opinión de que la moción de censura a estas alturas de la legislatura no puede ni debe entenderse como un gobierno de cambio, ya no hay tiempo para desplegar una política que revierta la situación actual. La moción supondría únicamente un mero gobierno de emergencia que ayude a sentar unas bases mínimas para sacar a la ciudad de su parálisis y garantizar una serie de medidas urgentes que permitan que quien tome las riendas del gobierno en 2019 se encuentre en una situación más óptima que la actual para afrontar los años venideros.

He defendido en todo momento que la posición de Podemos sobre la moción de censura debe recaer en última instancia en los inscritos e inscritas de Podemos y que la decisión última debería emanar de la asamblea de XsP. Así lo defendí durante la campaña electoral de las primarias de Podemos y así lo he defendido en el Consejo Ciudadano Municipal de ayer en el que la propuesta de realizar una consulta sobre la misma cosechó tan solo 6 votos.

La asamblea de Podemos del pasado 3 de julio sometió a votación la propuesta de moción de censura si esta era encabezada por Unidos Podemos, esta votación fue ilegítima por dos motivos principalmente.

1. La propuesta estaba descartada ya que IU se había manifestado en contra de la misma, y tanto el Secretario General como la comisión negociadora lo sabían, pues habían mantenido una reunión el día anterior con IU de cuyo contenido no informaron previamente a la asamblea.

2. La votación se produjo sin garantías democráticas ya que no se comprobó que tod@s los presentes fueran inscrit@s de Podemos, y sabemos que no tod@s lo eran. Si como señaló el Secretario General era una votación consultiva, esta no puede convertirse en un mandato imperativo en las negociaciones.

Durante este tiempo siento que hemos sido incapaces de levantar una alternativa municipalista que significara un cambio en la forma de hacer política, que implicara la participación activa de la ciudadanía en las políticas municipales y que ayudara a romper relaciones clientelares abriendo las puertas del Ayuntamiento a su gente de manera transparente. Lejos de esto hemos repetido viejos clichés de la política que veníamos a cambiar, este es un fracaso del que yo también me siento responsable, y es por ello, que ante la imposibilidad de modificarlo y ante la impotencia e incoherencia que para mí supone votar contra un Plan Económico que comprometerá a la ciudad para los próximos años, a la vez que no somos capaces de levantar una alternativa, he decidido entregar mi acta de concejala antes de la votación. La responsabilidad de la falta de esta alternativa recae sobre las espaldas de TODOS los partidos implicados, sin excepción, y es especialmente decepcionante la falta de entendimiento entre IU y XsP dejando huérfanos de alternativa a una parte fundamental de las capas populares, pero cada cual habrá de hacer el balance en su propia casa. Siento si esta decisión perjudica en algo al proyecto de Podemos, opción que defiendo desde su creación. Fui fundadora de esta organización y me he dejado la piel por levantar una alternativa popular de transformación, pero no puedo compartir ni defender desde un papel institucional los derroteros que se han emprendido desde Podemos en esta ciudad.

No soy una profesional de la política, soy una ciudadana de a pie haciendo política que nunca ha pretendido hacer de la misma un modo de vida, por ello no vine a las instituciones a mantener un cargo ni a pelearme por un sillón, vine a construir una alternativa popular que permitiera mejorar la vida de las personas y avanzar en la construcción de un mundo más justo e igualitario y siento que nada de esto, está ya encima de la mesa, por lo tanto, renuncio a seguir siendo parte de un proyecto como Xixón si Puede que considero fallido.