"No queremos bañarnos con miedo". Alrededor de medio centenar de personas se manifestaron ayer en la Escalerona para exigir la instalación de una depuradora que ayude a frenar la contaminación de la playa de San Lorenzo. El arenal empezó a preocupar a los vecinos en el último fin de semana de mayo, cuando un vertido de aguas fecales al río Piles contaminó la costa y se saldó con dos decenas de afectados -no se prohibió la entrada de bañistas a la playa- y, desde entonces, han sido varias las veces en las que la aparición de grandes manchas marrones en la superficie han acabado cerrando el arenal al público. "Tenemos que meternos al agua con miedo sólo porque el Ayuntamiento no nos informa de cuándo se ha producido un vertido. Desde mayo las manchas en la playa están siendo constantes; no podemos seguir así", explicó la vecina Amalia González.

La mujer hizo ayer de portavoz del resto del grupo que, según explicó, está formado por bañistas habituales de la playa. "Toda esta polémica con las manchas está haciendo que los que desde hace muchos años tenemos la costumbre de venir todos los días a San Lorenzo le hayamos cogido miedo al agua. El problema es que los usuarios de a pie no tienen forma de saber si el agua está contaminada o no. Las manchas se ven, pero puede que nos estemos bañando en un agua clara que, en realidad, está infectada de bacterias. Lo que exigimos es que se nos informe debidamente", resumió la mujer. "Es un peligro que tengamos que guiarnos por lo que se ve a simple vista. Tampoco estamos ciegos, a simple vista está claro que la playa da asco, pero hasta que todo esto se solucione necesitamos unos baremos orientativos, algún sistema con el que el Ayuntamiento nos pueda informar a tiempo de cuándo el agua es un peligro y cuándo no", añadió.

Otros usuarios presentes ayer en la protesta achacaron esta falta de información a una "estrategia política". "Sospechamos que como la primera gran mancha fue en mayo, justo al principio de la temporada turística, el Ayuntamiento ha tratado de taparlo para que la gente no cancele sus viajes y se vayan a otras ciudades. Lo que pasa es que no podemos anteponer el negocio turístico a la salud de los propios vecinos", explicaron. La "gran mancha" a la que hacen referencia se produjo en el último fin de semana de mayo, cuando un vertido de aguas fecales al río Piles contaminó parte del arenal de San Lorenzo. "Ese día empezó todo. Yo recuerdo meterme al agua extrañada y que, una vez dentro, tuve que salir corriendo y muerta del asco. Nunca había pasado algo así en San Lorenzo", aseguró González."Necesidad urgente"

Tras esa polémica el Consistorio prometió que prohibiría el baño por precaución cada vez que la playa amaneciese con alguna mancha similar. Desde entonces, esta medida se ha tenido que aplicar en varias ocasiones -las fuertes trombas de agua de las últimas semanas no ha parado de enturbiar el caudal del Piles- y, según los bañistas, esto demuestra "la necesidad urgente" de construir una nueva depuradora y un pozo de tormentas en la zona. "Ahora más que nunca se está demostrando que la depuradora actual no basta. Con cada tromba de agua sufrimos un vertido nuevo. Sorprende más lo que pasa en San Lorenzo porque es una zona con mucha afluencia pero, en realidad, la senda fluvial de Viesques está sufriendo algo parecido. Lo que antes eran simples molestias de vez en cuando ahora ya se han convertido en un problema de salud; varios de nuestros compañeros acabaron intoxicados y con conjuntivitis", aseguraron los manifestantes.

El pozo de tormentas al que hacen referencia ya está en la mente del Consistorio, que prometió el pasado mes que estaría operativo en el parque de los hermanos Castro, pero dentro de, como mínimo, dos años. Asimismo, la polémica construcción de la depuradora en la zona este de la ciudad lleva ya tiempo paralizada. "Pedimos que al menos se reconozca el problema. Hemos hablado con socorristas y nos dicen que están hasta el gorro de escuchar a los bañistas quejarse de picores por todo el cuerpo. Aquí todo el mundo lo sabe y nadie hace nada", lamentó González. La manifestación, de hecho, coincidió con la celebración de la travesía Playas de Gijón. La ganadora, Ainoa Silva, tuvo que ausentarse unos minutos antes de atender a los medios para darse una ducha, ya que, según explicó, sentía picores por todo el cuerpo. Fue, no obstante, la única participante en notar molestias.

Charanga en la reivindicación

El tono reivindicativo de la cita se alivió a ritmo de pasodoble gracias a la colaboración del grupo de charangas "Ventolín". Como en un principio parecía que la reunión no iba a congregar a demasiada gente, el colectivo se instaló alrededor del termómetro de la escalera número 4, pero la estrategia musical funcionó y pronto la zona se llenó de curiosos. Al final, los manifestantes tuvieron que ocupar buena parte de la acera del paseo de la playa para no entorpecer la entrada y salida de bañistas.