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La Banda de Gaitas "Villa de Xixón" recupera un timbal tras seis años de litigio judicial

Un exsocio, que se apoderó indebidamente del instrumento y se negó a devolverlo, ha sido condenado a seis meses de cárcel y a pagar 910 euros

Por la izquierda, Javier Díaz Dapena, José Luis García Díaz, Andrea Canal, María José González Suárez, Eloína Canal García, Adrián Martínez, Rubén Alba, Irene Méndez y Yolanda Carreira, ayer, a la puerta del Juzgado, tras recoger el timbal de la agrupación. MARCOS LEÓN

La Asociación Cultural Banda de Gaitas "Villa de Xixón" logró ayer recuperar uno de sus instrumentos después de seis años de batalla judicial contra un exmiembro que cuando dejó el grupo se llevó con él un timbal valorado en 910 euros que no le pertenecía. Ahora, tras ser condenado a seis meses de prisión por apropiación indebida, se ha visto obligado a devolverlo a sus legítimos dueños, que ayer acudieron al depósito del Juzgado a por él tras la ratificación de la sentencia por parte de la Audiencia Provincial de Asturias.

El origen de este insólito litigio se remonta al mes de noviembre de 2008. Hace casi una década el ahora condenado, un gijonés de 36 años, en el mes de noviembre de 2008, ya era miembro de la Banda Villa de Xixón, representada judicialmente por el abogado Javier Díaz Dapena. Fue entonces cuando recibió un timbal de la marca Pearl Snare Drum -valorado en 700 euros-, un pie soporte para el instrumento en cuestión, correas de sujeción y estuche, tres pares de mazas -valoradas en cien euros cada una- y otro juego de mazas de ensayo. Un material que se le cedía exclusivamente para poder desarrollar su función en las actuaciones de la agrupación musical.

Por ello, el ya condenado, firmó un documento en virtud del cual se comprometía a devolver todo lo recibido a la asociación cuando así se lo pidieran. No hubo problemas de ningún tipo a este respecto hasta que las desavenencias con otros integrantes de la banda motivaron su salida.

Era el 28 de noviembre de 2011 cuando desde la asociación se le requirieron los instrumentos que se encontraban en su poder. No hubo éxito alguno, por lo que reiteraron su demanda, vía burofax, el 27 de marzo de 2013. También de forma directa en una asamblea de socios del mes de abril. En ninguna de todas las oportunidades que se le dio al ya excompañero de gaitas lograron recuperar el timbal y el resto de instrumentos. Es por ello que se vieron abocados al Juzgado, al entender que la forma de obrar de su exsocio existía un ánimo de lucro además del perjuicio que les ocasionaba a todos ellos. En palabras de la acusación particular, era imposible sustituir ese timbal y sus accesorios porque se dejó de fabricar con el diámetro exacto como el ahora recuperado.

La vista oral, en el Juzgado de lo penal número 3 de Gijón, el entonces acusado declaró que si no había devuelto el material era porque los instrumentos "no pertenecían a esa asociación sino a otra y que si no lo dijo cuando firmó el compromiso de devolución fue porque sus dudas llegaron tiempo después de recibirlo. La magistrada Asunción Domínguez es muy clara en su sentencia: "las declaraciones del acusado y de los testigos de la defensa no solo no se aprecian contundentes sino que carecen de respaldo documental alguno". El fallo, confirmado por la Audiencia, impone además de los seis meses de cárcel el pago de una indemnización de 910 euros.

En la mañana de ayer, el director de la Asociación Cultural Banda de Gaitas "Villa de Xixón", José Luis García Díaz, acudió en compañía de su abogado a recoger el timbal. Cuando salió, con el instrumento en la mano, varios miembros del grupo aplaudieron y estallaron de alegría. "Hemos recuperado el instrumento, pero también la honra", aseguró José Luis Díaz, que ya tiene claro que el timbal quedará expuesto a partir de ahora en una vitrina en la sede donde ensayan.

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