Arcelor va a echar andar en agosto el proyecto con el que prevé reducir, a finales de 2019, en un 80% las emisiones contaminantes por la chimenea del sínter A, una de las dos plantas de sinterización que tiene en su factoría de Veriña. La inversión, incluida en el paquete que la multinacional siderúrgica anunció en diciembre del año pasado, ascenderá a 12 millones de euros y consistirá en la instalación de un filtro de mangas y de un ventilador.
La inversión, aprobada por la dirección de Arcelor Mittal será la primera de las actuaciones en los focos de emisión primaria de los sínter. Para 2022 está prevista otra actuación similar en el sínter B. La contaminación emitida a la atmósfera por las plantas de sinterización de la multinacional siderúrgica es una de las principales preocupaciones de los colectivos contra la contaminación y la solución a este problema fue uno de los asuntos que negociaron la siderúrgica y el Principado para dar de paso el proyecto de reconstrucción de las baterías de coque de Gijón, que también entrarán en servicio a finales de 2019.
La siderúrgica recordó ayer que la inversión que acaba de aprobar está orientada a reducir en un ochenta por ciento las emisiones de partículas a la atmósfera "en el foco más importante de la factoría de Gijón", con lo que las mismas quedarían por debajo de los 10 microgramos por metro cúbico normal. La reducción sucesiva de las emisiones de partículas contaminantes del sínter A en 2019 y del sínter B en 2022, en ambos casos en un 80%, cumplirán con holgura la nueva autorización ambiental integrada para la factoría siderúrgica gijonesa, que impone una reducción del 40% en las emisiones de los sínter respecto a los niveles actuales.
La previsión de la multinacional anglo india es que la obra civil arranque en febrero de 2019, tras haberse completado la fase de ingeniería, concluyendo a finales de ese año con la puesta en servicio del nuevo equipamiento medioambiental para su factoría de Gijón.
La tecnología que se va a implantar en la instalación va a combinar el nuevo filtro de mangas que se va a instalar con el electrofiltro existente en la actualidad, ubicándose a continuación de este último. Este sistema combinado de filtros tratará el total del caudal de humos generados en el proceso de sinterización de mineral de hierro que se emiten por el foco primario del sínter A. La inversión incluye la instalación de un nuevo ventilador detrás del filtro de mangas, ventilador que tendrá una potencia aproximada de 2.800 kilovatios.
Entre las inversiones anunciadas a finales del año pasado por Arcelor para su factoría gijonesa, también está prevista la renovación del enfriador y sustitución de soplantes del sínter B, cuyo objetivo es reducir los niveles de ruido que genera esta instalación.
La siderúrgica también había anunciado inversiones para 2019 en los hornos altos de Gijón y en la acería de Avilés para reducir emisiones a la atmósfera, así como la instalación de pantallas vegetales en Gijón, además de otras medidas para reducir las emisiones al agua y mejorar la eficiencias.
