Vecinos de la zona oeste de Gijón se han mostrado alarmados por el humo que desde hace varios días están echando las chimeneas del sínter de ArcelorMittal, de color más amarillento de lo habitual. Los vecinos sospechan que "no se están tomando las medidas correctoras para la reducción de emisiones contaminantes por parte de dicha empresa". Arcelor sostiene que no se están incumpliendo los límites de emisiones contaminantes y que han avisado al Principado de la incidencia, que comenzó la semana pasada y cuyo origen desconocen.

Los vecinos, en cambio, sostienen que "debido a que los vientos soplan en dirección sur, es difícil que las estaciones ambientales reflejen la realidad de lo que se está emitiendo a la atmósfera, lo cual no quiere decir que la población no esté preocupada por lo que esto puede suponer para su salud y por la aparente falta de control por parte de la administración pública. Como ciudadanos nos vemos en la obligación de denunciar las situaciones en las que observamos que las administraciones publicas no actúan de una forma eficaz, ya sea porque tienen las manos atadas por las presiones que ejercen estas grandes empresas o por una falta de medios y personal en la época estival".

Arcelor insiste en que a pesar del color del humo, las emisiones están "por debajo de los límites establecidos en la autorización ambiental" para la factoría gijonesa y recalcan que esos humos "no son tóxicos".

La multinacional ha anunciado una inversión de 12 millones de euros para reducir las emisiones en el sínter A a finales de 2019, con un nuevo filtro de mangas y un ventilador.