"La palabra que mejor define lo que está pasando con la depuradora del Pisón es prepotencia". Así lo aseguró ayer Adrián Arias, presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Gijón: "son 18 años de prepotencia, de tira que libras, y de entender que los vecinos y vecinas nunca iban a tomar la decisión de defender la salvaguarda de sus derechos. 18 años de prepotencia de la administración frente a los vecinos y vecinas".

Por ello, Arias pide a las administraciones "que se pongan las pilas y trabajen para solucionar los problemas de depuración en la zona este gijonesa", enfatizando que "la solución técnica y política la tienen que tomar las personas que, por su salario, se le han encomendado tomar esas responsabilidades".

Para Arias, "es intolerable que los vecinos tengamos que pagar, a 60.000 euros diarios, la incompetencia de los políticos y sus chanchullos". Y asegura: "hay unas inexactitudes técnicas que hacen ver que, a todas luces, alguien ha metido la pata y cometido errores de bulto".

Además, el representante vecinal afea cómo "siempre tiene que venir un juez a imponer una multa para solucionar los problemas". Por ello, llegados a este punto, Arias asegura que "es la hora de hacer política en el sentido real de la palabra".

"Hay que solucionar los problemas de depuración de la zona este, no solo por la multa, que también, sino porque es un problema de salud" y advirtiendo, de antemano, que "no vamos a entrar en un enfrentamiento entre vecinos".