Los habitantes de las calles Santa Primitiva y Santa Irene, en el barrio de Contrueces, se ven obligados a realizar un rodeo de tres kilómetros para acceder a sus viviendas, obligados por el corte del Camín del Llagar, debido a las obras que se están realizando en el entorno del camino de los caleros y la carretera del Obispo. Así lo denunció ayer el grupo municipal del PSOE, tras reunirse con los vecinos. "Es una situación absurda y un ejemplo más de la manera que tiene este gobierno de actuar haciendo oídos sordos a las peticiones de los vecinos y traspasando a los técnicos la responsabilidad", enfatizó el portavoz socialista José María Pérez, quien pide "que se les dé acceso limitado a los vecinos y residentes de la zona por un vial que ya existe, que ya está urbanizado".