Después de meses de angustia, ayer por fin los más de 700 afectados de iDental en Asturias tuvieron motivos para volver a sonreír. Con aplausos reaccionaron al registro que agentes de la Policía Judicial realizaron durante unas tres horas en la clínica de Tremañes. De la nave, ubicada en la Avenida de los Campones, se incautaron un total de 297 cajas con los historiales clínicos de los pacientes, que fueron custodiados por inspectores de la consejería de Sanidad. "Es un gran paso, estamos emocionados", celebraron los damnificados a las puertas de la clínica. El operativo se efectuó de forma paralela en otros dieciocho locales de iDental en España por orden del Juzgado de instrucción número 5 de la Audiencia Nacional en busca de pruebas que demuestren hechos delictivos, como administración fraudulenta, estafa, apropiación indebida, falsedad documental, lesiones y contra la salud pública.

El juez José de la Mata asumió recientemente la investigación del caso iDental ante el "volumen extraordinario de la causa", la existencia "de miles o decenas de miles de perjudicados" y el funcionamiento de una compleja estructura societaria y de financiación. Sólo en Asturias, la Agencia de Sanidad Ambiental y Consumo ha recibido más de 700 reclamaciones y el Gobierno regional no descarta que la cifra aumente. El registro en la sede gijonesa se inició sobre las doce y media de la mañana y en él participaron tanto agentes de la Policía Nacional como inspectores de la consejería de Sanidad. Principalmente se incautaron historiales clínicos de los pacientes, que se cargaron en tres furgonetas del Principado. "Hemos asumido la custodia de estos documentos, que se trasladan a un inmueble, donde se guardan otras historias clínicas del servicio de Salud. En total, son 297 cajas precintadas y selladas. Estamos colaborando con la Autoridad Judicial y seguimos a su disposición para actuar respecto a los historiales clínicos de los ciudadanos como se considere oportuno desde este ámbito judicial", manifestó el consejero de Sanidad, Faustino Blanco. Los registros se efectuaron también en clínicas de Mallorca, Tarragona, Girona, Barcelona, Sevilla, Córdoba, Almería, Cádiz, Málaga, Zaragoza, Valencia, Alicante, Castellón, Madrid y Murcia.

Para la plataforma de damnificados el registro de ayer es "un gran paso", ya que dependen de los historiales clínicos para completar sus tratamientos dentales y para presentar una denuncia por fraude. Esa denuncia, avanzó el portavoz de la plataforma, Javier Quiroga, será "colectiva civil": "Ya estamos trabajando en ella". "Estamos muy emocionados. Nuestras historias están ahí. No sabemos ni siquiera si las placas que nos dieron en su día son nuestras, ya desconfiamos de todo. No pedimos dinero, sólo que nos arreglen la boca. Nos sentimos estafados y humillados, parece que tenemos la peste", reivindicó Avelino Toral, "Pichi", uno de los afectados que ayer se concentraron a las puertas de la clínica de Tremañes.

"Pichi" aplaudió e incluso lloró de alegría. Dio abrazos y besos a sus compañeros de sufrimiento porque cada vez ve más cerca el final de su calvario. "Me sacaron todas las piezas y me dejaron la boca así", muestra a la cámara, sin ningún apuro, los tornillos de los implantes. Pero no fue al único al que ayer le saltaron las lágrimas: tampoco pudo evitarlo Vanesa López, que lleva "año y medio" para que le devuelvan un préstamos de mil euros por una intervención que nunca le hicieron. A Conchita Fernández el operativo de ayer le da esperanzas. "Llevo casi dos años esperando unos dientes. Me salió hasta un tumor y tengo la boca infectada por la espera. Es terrible", denunció.

Los damnificados continuarán con su lucha. Piden a la consejería de Sanidad que atienda primero los historiales de los casos más sangrantes para derivarlos "cuanto antes" al Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de Asturias, que realizará una valoración gratuita de cada caso. Los afectados van más allá y reclaman también peritajes gratuitos. El portavoz de sanidad del PP en la Junta General, Carlos Suárez, que se reunió ayer con algunos de los pacientes, acusó al gobierno del Principado de "falta de diligencia" y actitud "poco activa" ante el fraude de iDental, "el mayor escándalo sanitario del mundo", como ya lo ha bautizado el Colegio General de Dentistas. "Las personas damnificadas no se merecen el estado de vacaciones de la administración y no ven desde el Gobierno ninguna acción efectiva que les haga pensar que tengan una solución", recalcó Suárez. En este sentido, los afectados rechazan las soluciones propuestas por la Administración, como culminar sus tratamientos en otras clínicas dentales que operan como franquicias, a las que ven como los próximos "casos iDental".