A los propietarios del llagar El Mancu de Deva no se les va a olvidar el servicio de cenas que dieron ayer martes. Una pareja (un hombre y una mujer a los que los responsables de este establecimiento no habían visto nunca) se dieron un homenaje en la terraza de su establecimiento de hostelería y luego hicieron un "simpa" de los de manual. "Eran unos profesionales", es de lo poco que acierta a decir el dueño del llagar al explicar lo sucedido. Los estafadores a los que ahora buscan cenaron como quisieron y se fueron corriendo.

Todo empezó como una escena normal. Los dos comensales se sentaron a la mesa en la terraza. Habían acudido con un perro. Pidieron un chuletón de más de un kilo y no se privaron de nada. Hasta chupitos para rematar la cena. La cuenta ascendía a casi 100 euros. Y decidieron no pagarla. O mejor dicho, parece que ya tenían decidido de antes que "la dolorosa" no la iban a asumir.

"Primero la chica fue a dejar el perro y acercaron un poco a su mesa el coche en el que habían venido. Pusieron 100 euros encima de la mesa como que iban a pagar mientras se tomaban los chupitos para que no sospecháramos. Lo vimos y nos quedamos tranquilos. Pero luego, en un momento determinado, el chico se fue con el perro al coche y la chica cogió el dinero y salió corriendo", lamentaban esta noche el dueño del local, Joaquín Fernández.

Redes sociales

El hostelero ha acudido a las redes sociales para intentar dar con los responsables de esta estafa. Ha colgado en su perfil de Facebok varias imágenes en donde se ve a los acusados. El objetivo es que se compartan las instantáneas por si alguien los identifica y ayuda a la Policía.