La decisión del gobierno forista de establecer nuevas estructuras dentro del organigrama de trabajo del Ayuntamiento -en concreto la creación de oficinas técnicas específicas en algunas concejalías- está generando todo un maremoto en la vida interna municipal. Representantes sindicales consideran que la tramitación seguida por Foro no cumple con la legislación vigente y está llena de irregularidades. Ayer mismo hubo una reunión específica de la Junta de Personal para tratar el asunto y para hoy están previstas reuniones con el equipo de Ana Braña, concejala de Organización Municipal.
La polémica afecta a la oficina de ejecuciones subsidiarias -cuya constitución con un equipo de ocho personas anunció en el ultimo Pleno el concejal Fernando Couto como una nueva herramienta dentro de la concejalía de Urbanismo para controlar los problemas que genera el abandono y falta de mantenimiento de edificios y solares de la ciudad- pero tiene mayor incidencia en la denominada oficina de Movilidad. Una estructura cuya puesta en marcha se comunicó a principios de mes a todos los integrantes del Foro de la Movilidad y que ahora miembros del gobierno forista se plantean paralizar. La previsión era que esta oficina, con Ignacio Díaz al frente, se encargara de mantener vivo el proceso y las medidas del Plan de Movilidad Sostenible y Seguro (PIMSS) en el que llevan trabajando meses representantes de unas ochenta entidades.
Desde ámbitos sindicales del Ayuntamiento se recuerda que "no se pueden generar estructuras así de buenas a primeras". Cualquier elemento de ese tipo tiene que pasar primero por la Mesa general de negociación. Ese es un requisito obligatorio aunque después el gobierno tenga las manos libres para ejecutar su propuesta con o sin el acuerdo con los representantes de los trabajadores. En los casos de estas oficinas, también se tienen dudas sobre la corrección del proceso seguido para formalizar esas nuevas estructuras de trabajo. Por ello la Junta de Personal decidía exigir información al gobierno.
Y desde un punto de vista más general, los sindicatos no entienden que Foro tome estas decisiones cortoplacistas cuando se lleva meses trabajando en una reordenación integral de toda la estructura del Ayuntamiento a través del Plan Reto (Plan de reforma y transformación organizativa del Ayuntamiento de Gijón).
Si la oficina de ejecuciones subsidiarias está bajo la responsabilidad política de Couto, la oficina de Movilidad es asunto del edil Esteban Aparicio. El concejal ya anunció en su momento la intención de que Ignacio Díaz siguiera coordinando todos los trabajos del Plan de Movilidad tras tener que dejar la jefatura de Tráfico por sentencia judicial.
Su nombramiento fue llevado a los tribunales por Usipa al entender que era un puesto reservado a funcionarios. Díaz es personal laboral. El juez dio la razón al sindicato y anuló el nombramiento. Díaz volvió a su puesto en el área de planificación y modernización pero sin desvincularse del Plan de Movilidad. Como jefe de Tráfico se nombró a Paulino Tejado.
Si la decisión de Foro de crear la oficina de Movilidad genera rechazo dentro del Ayuntamiento, la posibilidad de que de marcha atrás en esa idea lo genera entre algunas de las entidades vinculadas a la elaboración del Plan. Igual que lo generó en su momento ver que representantes de las áreas municipales de Tráfico y Policía Local no daban el visto bueno al documento final consensuado por todas las entidades sociales. Este viernes se cierra el plazo de presentación de alegaciones al Plan de Movilidad.
