En el Hospital de Jove se ha prueba, desde hace unos meses, un nuevo sistema de avisos, principalmente para acompañantes de pacientes, que puedan resultar más útiles que la clásica llamada por megafonía y, sobre todo, con mayor respeto a la intimidad. El método que se ha puesto en práctica traduce en mensajes de texto que son enviados al móvil las llamadas que antes se hacían por altavoz.

La plataforma se experimentó en Urgencias, con miras a que pudiera resultar útil también en el área de espera de los acompañantes de pacientes quirúrgicos. El método aporta mejoría tanto en la protección de la intimidad de los pacientes como en la comodidad de las familias, que ya no estarían obligadas a esperar las llamadas sin moverse de las proximidades. Precisamente este mes el Sespa informaba que también la red sanitaria pública asturiana está por la labor de implantar sistemas de direccionamiento de pacientes que contribuyan a cumplir con la ley que vela por la privacidad.

La puesta en práctica en Jove ha resultado menos útil de lo previsto por el poco uso que hacen algunas personas del sistema de mensajes del móvil, o la demora que se genera entre el aviso y la presencia de las personas requeridas. De ahí que desde la gerencia aseguren que se seguirán probando otros sistemas.