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Los asuntos más importantes del Ayuntamiento para el último tramo del mandato

La alcaldesa Moriyón encara el final de su agenda municipal

La investigación interna sobre la "trama Enredadera" y el plan de ajustes al gasto marcan el inicio del nuevo curso político

La bancada de la izquierda, con la silla que dejó vacía -en la fila superior- la renuncia de la edil Verónica Rodríguez (XSP). ÁNGEL GONZÁLEZ

Uno de septiembre. La vuelta al cole ya marca el horizonte de muchas familias gijonesas y el Ayuntamiento se prepara para retomar la normalidad en su agenda de trabajo tras un agosto a saltos entre actos feriales y eventos festivos, por un lado, y plenos y consejos de administración de empresas municipales en convocatoria extraordinaria, por el otro. Pero no es un inicio de curso normal para los munícipes gijoneses. Y no sólo porque sea el último tramo temporal de un mandato con fecha de caducidad en las elecciones de mayo de 2019. Eso se vive cada cuatro años. La diferencia es que ya se sabe desde ahora que Gijón tendrá nuevo regidor. La decisión de Carmen Moriyón de optar al liderazgo regional de su partido, Foro Asturias, como paso previo a la candidatura a la presidencia del Principado -ampliando de lo local a lo autonómico el ámbito de sus aspiraciones políticas- garantiza poner punto y final a una etapa de ocho años de la historia municipal. La cirujana se convirtió en regidora de su ciudad natal en junio de 2011 arrebatando la Alcaldía, al frente de un partido de mínima trayectoria vital, a un PSOE que la ostentaba desde hacía más de tres décadas.

Pero antes de la despedida, a Moriyón y su equipo de gobierno le queda mucha tela que cortar entre las paredes de la Casa Consistorial. De la ordinaria de todos los últimos trimestres de año y de la excepcional que va imponiendo la realidad de la política. A no mucho tardar, el gobierno forista debe hacer efectivo el mandato del Pleno -aprobado por unanimidad en la sesión del pasado día 16- de constituir una comisión no permanente de trabajo que indague en las vinculaciones entre el Ayuntamiento, y sobre todo sus contratos, y las empresas vinculadas a la trama "Enredadera".

Gijón parecía libre de esta red de corrupción cuya investigación llevó detenidos a concejales y jefes policiales de municipios de toda España, pero la lectura en el sumario judicial de conversaciones en los teléfonos pinchados de los empresarios acabó evidenciando que los tentáculos de "Enredadera" también se habían dejado sentir en esta orilla del Cantábrico.

Ante esta comisión la oposición ya ha pedido que comparezcan varios concejales de Foro, responsables del área de contratación y los miembros de la plantilla municipal que son citados en esas conversaciones: el director general Económico-Financiero que recibió una llamada directa de uno de los empresarios a su móvil, los trabajadores del servicio de Modernización que tuvieron una reunión para explicar el proyecto "Gijón IN" y el jefe de la Policía Local que tuvo una comida con el empresario Ángel Luis García, "El Patatero".

Pero además se ha pedido la comparecencia de empresarios, sindicalistas y del fundador y secretario general de Foro, Francisco Álvarez-Cascos, que también tuvo contactos con empresarios de la trama. La oposición municipal en bloque quiere saber si esa relación generó alguna intermediación de Cascos ante el ayuntamiento gijonés, con un gobierno de su partido, en favor de esos empresarios. Moriyón lo ha negado rotundamente.

También ha llegado la hora de ver negro sobre blanco la incidencia real de vivir bajo un Plan Económico-Financiero (PEF). El Pleno rechazaba en julio este documento de ajustes para 2018 y 2019 impuesto por el incumplimiento de la regla de gasto en el ejercicio de 2017, pero el gobierno de Foro ya dejó claro desde un primer momento que lo ejecutaría para cumplir con la ley y evitar una intervención formal de las cuentas municipales. Así que a lo largo de estos meses a la concejala de Hacienda, Ana Braña, le toca diseñar las ordenanzas fiscales y un presupuesto para 2019, seguir adelante con las modificaciones presupuestarias que sean necesarias para avanzar en el presupuesto prorrogado de 2018 e ir limando los gastos partida a partida para cumplir con el PEF. El trabajo no parece fácil y garantiza bronca. Para ejemplo, el reciente botón de la protesta en la calle de las entidades asociativas que trabajan en el campo de la solidaridad internacional y la cooperación al desarrollo al ver como, sin previo aviso, la convocatoria de ayudas pasaba de 1,2 millones a 850.000 euros.

Un fuego que tendrá que intentar sofocar el gobierno de Foro en este inicio de curso. Igual que tendrá que buscar alguna solución a la precaria situación económica de la Empresa Municipal de la Vivienda, que puede poner en peligro su capacidad para seguir dando ayudas directas a las familias. Más de cuatro millones al año. Las ideas iniciales presentadas por la edil forista Eva Illán de traspasar dinero desde Cooperación Internacional y ser más estrictos con las bases de las ayudas no ha gustado a la oposición, Illán es también la presidenta de la Fundación Municipal de Servicios Sociales donde, este mes, se esperan avances para garantizar la continuidad de la denominada renta social. Un proyecto de nuevo cuño que se puso en marcha en 2017 gracias al apoyo de Xixón Sí Puede e IU -que a cambio favorecieron la aprobación del presupuesto municipal para ese año- y que lleva meses retrasando la puesta en marcha de una nueva convocatoria.

Servicios Sociales también tendrá que bregar con los contratos del servicio de teleasistencia y de ayuda a domicilio. El primero en proceso tras ser anulada la convocatoria inicial y ser necesario un contrato puente para que el servicio no se interrumpiera este mes, y el segundo envuelto en la polémica de la trama "Enredadera". Aunque los técnicos municipales no han detectado fallos, Xixón Sí Puede y parte de las trabajadoras piden ya su resolución por incumplimientos del pliego de condiciones. Este contrato entró en vigor el uno de julio.

Y por si Eva Illán tenía poco también debe asumir en su vuelta al cole los compromisos con el movimiento vecinal de avanzar en la nueva reglamentación de los consejos de distritos y la participación ciudadana. Ahora mismo sobre la mesa de trabajo hay un modelo de nuevo reglamento de participación ciudadana diseñado desde la Federación Municipal de Municipios y Provincias (FEMP) como ejemplo a seguir por los ayuntamientos

Puestos a hablar de nuevas ordenanzas, reglamentos y planes estratégicos, Gijón tiene varios frentes abiertos. Alguno de tanta envergadura como el Plan de Movilidad -ahora mismo pendiente de la contestación de las alegaciones ciudadanas- antes de seguir su tramitación y otros tan novedosos como el plan de regeneración urbana, cuyo desarrollo se pretende contratar en este inicio de curso político con el objetivo de fijar las prioridades para la rehabilitación de espacios. La buenanueva puede llegar, tras años de polémicas y debates, con la aprobación definitiva del Plan General de Ordenación (PGO). El objetivo de Foro, y más en concreto de su edil Fernando Couto, es dejar cerrado el asunto antes de final de mandato y conseguir así recuperar la normalidad urbanística para un Gijón que se rige ahora mismo por un planeamiento de 1999.

Aunque no sea competencia municipal, la mirada estará atenta en los próximos días al inicio de los trabajos de vaciado del túnel del metrotrén contratados por Fomento. Un aperitivo a ese nuevo rediseño global del plan de vías y su financiación al que dieron el visto bueno el Ayuntamiento, el Principado de Asturias y el Ministerio de Fomento y que quedó en el limbo tras el cambio de gobierno de Madrid. Toca firmar documentos, volver a planificar el espacio a partir de la ubicación de la estación intermodal frente al Museo del Ferrocarril e intentar de nuevo vender el suelo para generar ingresos en favor de la sociedad Gijón al Norte.

No porque se acabe la temporada buena del verano dejará de mirarse a la playa de San Lorenzo, que ha estado en el centro de las preocupaciones de los gijoneses con manchas marrones y malos olores que han puesto en duda la calidad de sus aguas y dañado su imagen turística. No muy lejos está la paralizada depuradora de la zona Este que tanto tiene que ver con la multa que Europa ha impuesto a España por carencias en el saneamiento de sus municipios. A falta de una decisión definitiva se ha recuperado, como opción provisional, el desarenado y desengrasado que tenía la antigua planta de pretratamiento del Pisón. Además, la Empresa Municipal de Aguas debe ocuparse en estos momentos de poner en marcha las obras de los pozos de tormenta de Hermanos Castro y El Arbeyal e investigar los posibles vertidos a la red desde el matadero.

A la agenda de trabajo hay que sumar "clásicos" del mandato como avanzar en el diseño de Tabacalera o afrontar los problemas en las obras viarias cuyo máximo ejemplo está en Marqués de San Esteban. Y una cita marcada en rojo en el calendario de los próximos días: el 9 de septiembre. Nueva fecha para la celebración de los actos del 50.º aniversario del Pueblu d'Asturies. Aquellos que se suspendieron entre bronca política y malestar social y cultural a causa, dijo el gobierno, de un nido de avispas.

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