El juicio contra el ciudadano marroquí procesado por venta y distribución de droga -hachís y cocaína- en Gijón acabó suspendido ayer después de que el procesado no se presentase en la sala de vistas de la sección octava de la Audiencia Provincial. Esta ausencia -sí acudió su abogado defensor y los agentes de policía que llevaron a cabo la investigación que permitió detenerle- implicará la búsqueda de una nueva fecha para este juicio y la búsqueda del acusado.
La Fiscalía sostiene que este hombre formaba parte de un grupo organizado y estable dedicado a la venta y distribución de droga a través de varios locales repartidos por la ciudad. En concreto, el acusado lo hacía desde un bar en la calle La Mancha, pero en la operación fueron intervenidos en varios inmuebles de Gijón hachís valorado en 23.502 euros y otros 7.175,68 euros en cocaína, además de balanzas de precisión. Por todo ello solicita una pena de cárcel de siete años por dos delitos: delito contra la salud pública (cinco años de cárcel) y otro de pertenencia a grupo criminal (un año de prisión). Además, como multa, le exigen el pago de 50.000 euros. En caso de ser condenado, la Fiscalía solicita que sea expulsado de España tras cumplir la pena de cárcel.
