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La playa acosada

El arenal de San Lorenzo ha pasado de 50.000 metros cuadrados a 20.000 en pleamar, pese a los vaticinios triunfalistas de algunos expertos

Imágenes áreas de San Lorenzo tomadas en 2001 y 2006 que muestran la pérdida de arena.

La explaya de San Lorenzo, que era uno de los emblemas del verano y turismo de Gijón, ya sólo tiene arena seca en pleamar desde las escaleras 11-12 a la 15 (Piles). Según algunos "expertos" posturean, San Lorenzo mantiene 100.000 metros cuadrados de arena seca en pleamar, y cada primavera tiene más que la anterior o se va a arreglar sola. Lo cierto es que en el verano de 2018 dispone sólo de unos 20.000 metros cuadrados por 30.000 de hace unos años o unos 50.000 antes de la ampliación del puerto de El Musel. La geomorfología es el estudio de la historia y características de las formas del relieve terrestre. Incluye por tanto la topografía del relieve, los desniveles del terreno, cuanto la geología, la composición de sus materiales; viene a ser como la historia de las geografías. El contacto entre la tierra y el mar no es una línea fija, sino una superficie dinámica. Incluye el estero, espacio comprendido entre el nivel de la máxima pleamar y la mínima pleamar; una parte litoral superior a la orilla de la marea alta, pero bajo la influencia de la acción directa del agua del mar; y una parte siempre sumergida donde trabajan las olas rompientes y las corrientes de resaca. Las transgresiones o avances marinos y regresiones o retrocesos durante el Cuaternario demuestran que las costas tienden a buscar un perfil de equilibrio, que puede ser alterado por la acción humana.

Es el caso entre otras de la playa de San Lorenzo en Gijón, donde el estero ha sido invadido parcialmente, sobre todo en su sector occidental por las construcciones del paseo del Muro, aparcamiento subterráneo y viviendas. La ensenada gijonesa se extiende entre el cerro de Santa Catalina, al Oeste, y la Punta del Cervigón, al Este, casi unos 1.500 metros, con la desembocadura del riachuelo Piles a unos 1.300 m al Este, y tiene una orientación E10ºN-W10ºS. En 1887 el Boletín Oficial de Oviedo publicaba el edicto sobre el proyecto de un muro en la playa de San Lorenzo. Desde la calle de Jovellanos recorrería una longitud de 1.100 metros terminando junto a la desembocadura del riachuelo Piles. El terreno ganado al mar, de 86.442 metros cuadrados, se dividiría en cinco grandes manzanas. Sin embargo al desarrollarse las obras desde 1907 -durarían otros siete años más- con un presupuesto de 263.000 pesetas, tras pasar la zona de las "Tiendas del Aire" se decidió avanzar más hacia el mar. Desde la calle Juan Alonso se cambió la distancia de 14 metros desde las casas al mar por los 9 metros actuales; es el llamado "martillo de Capua". Así pues las primeras causas del retroceso de la playa fueron la invasión humana creciente del estero, y usar la propia arena para rellenar parte del paseo "ganado al mar" del muro de San Lorenzo.

El segundo momento de gran impacto en el otrora gran arenal gijonés es la ampliación exterior del puerto de El Musel, con diques desde del Cabo de Torres con una longitud total de 3.847 m, para abrazar una nueva dársena de 145 ha. El anterior dique exterior inducía el oleaje hacia el sector central de la bahía. El nuevo dique exterior, ubicado en forma de "C" hacia el noreste, induce el oleaje hacia el sector central y oriental de la ensenada; la nueva tendencia será a acumular arena en la parte occidental, y a erosionar más arena en la parte oriental de la playa. Influyen también las dragas portuarias (mayor calado en dársena y accesos), en la medida que afectan a la pendiente submarina hacia la playa litoral, provocando corrimientos de arena para equilibrar los grandes huecos. Para cuantificarlo mejor es necesario actualizar la batimetría. Y las mediciones de arenal seco deben hacerse considerando los coeficientes medios de las mareas variables. En cualquier caso es clara y evidente su escasez. Siendo una acción humana el factor principal de la pérdida de arenal, es falso que la playa se vaya a regenerar sola. Y es falso que no se pueda arreglar, puesto que en Coruña en 2010 Costas ha regenerado las playas de Riazor y Orzán en tres meses por 8´5 millones, pese a la oposición de los antiturismo y ultraecologistas, y ahora tienen arena seca en pleamar en toda su longitud. Sólo el turismo, sin contar otros impulsos a transportes y comercio, supone más un 10% del PIB y del empleo español.

Los ingenieros autores del proyecto de ampliación del puerto de El Musel y estudios consiguientes proponían, como consecuencia de su estudio técnico, rellenar con 110.000 metros cúbicos de arena (IBERIN SA, 2010) para mantener 20 metros de arena seca en pleamar en toda la ensenada. La cuestión no es si hay medio metro más o menos de altura donde queda arena seca (Piles), sino por qué no hay un metro más de arena seca en el área central y de Salvamento. El proyecto de ampliación del puerto de Gijón (2004-2008), entre sus 579 millones de presupuesto, planteaba 2,6 para regenerar la playa de san Lorenzo, arreglo que después fue boicoteado. El presunto retorno a la "normalidad" del arenal tras cada temporada de temporales que defienden algunos parece chocar con la evidencia, pues cada año caben menos casetas de rayas bicolores. Además es una "normalidad" de playa degradada y de escasez de arena seca provocada. Llevar 10 metros atrás la línea de edificios ya no tiene solución. Para quienes dicen que rellenando los temporales se volverían a llevar la arena, cabe recordar que baten con más fuerza en marea alta: con pleamar el mar sedimenta arena, acumulándola en las defensas del estuario; es en la bajamar cuando el agua la erosiona arrastrándola mar adentro, según las corrientes de derrubios (granos) y órbitas elípticas.

Para colmo, las aguas vertidas sin depurar desde el Piles, por las chapuzas con la depuradora del Pisón, han convertido la bahía este verano en lodazal y bochorno. Así pues la pérdida de arena seca se ha recrudecido en los últimos años tras la ampliación exterior de El Musel, que ha virado el oleaje inducido hacia el Noreste, del sector central al centro-oriental de la ensenada. El BOE 24/01/2004 publicaba la Declaración de impacto ambiental sobre el proyecto "Ampliación del Puerto de Gijón" de la Autoridad Portuaria de Gijón, que establecía la necesidad como medida correctora para recuperar la anchura suficiente de playa de cuantificar las aportaciones de arena, en función del perfil de equilibrio de la playa y sus correspondientes batimetrías. En San Lorenzo, donde en la segunda mitad del siglo XX había arena seca hasta las escaleras 6/7 en pleamar, ahora falta la arena hasta en la escalera 10 y el Tostaderu. 200.000 empleos menos en España en agosto. Turismo, comercio y empleo en Gijón siguen esperando. ¿Cuál es el plan...?

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