Crear una zona franca en el Puerto de El Musel es el objetivo que persigue el Partido Popular, que esta semana ha registrado una proposición no de ley en el Congreso de los Diputados para lograrlo. Una apuesta que, a criterio de los populares, logrará crear empleo y fomentar las exportaciones en la región, tanto de empresas autóctonas como de fuera. "Es una forma para atraer empresas que se instalen ahí y creen empleo, y también para potenciar la exportación de empresas asturianas", explicó ayer la diputada nacional Susana López Ares en un encuentro con los medios en Gijón y rodeada de la plana mayor del Partido en la ciudad.

El Musel, explicó la diputada nacional, es el Puerto de España que goza de más movimiento de graneles sólidos en los dos últimos años, unos datos que "hay que aprovechar y potenciar". Esta propuesta, que se debatirá en el Congreso, "permitirá beneficios para aquellas empresas que quieran utilizar las instalaciones de la zona franca", explica López Ares. ¿Cómo? "Cuando traigan productos del extranjero y posteriormente quieran dedicarlos de nuevo a la exportación se evitará el pago de aranceles y del IVA", argumenta. Este hecho, defiende, logrará "potenciar la exportación por parte de empresas asturianas" así como atraer a nuevas firmas, que crearán empleo.

Frente a este modelo, prosigue la política popular, está el del PSOE, "que están poniendo en riesgo esas facilidades para las empresas y el empleo en nuestra Comunidad Autónoma" en referencia al cierre de las térmicas y la desaparición del carbón. "Es la diferencia de quien no trabaja por Asturias o de quien trabaja en contra de Asturias", incidió la diputada señalando negativamente a socialistas, podemistas y Ciudadanos. "Si se cierran las térmicas asturianas estamos poniendo en riesgo el sistema productivo, El Musel, el transporte de mercancías y también el empleo", enumeró López Ares antes de cederla la palabra al líder de los populares en Gijón, Mariano Marín.

En palabras del exdelegado del Gobierno esta medida "va actuar como un imán, un polo de atracción de empresas que dinamizará la ciudad, generará nuevas actividades, será un reclamo para que se asienten en Gijón nuevos sectores, generará empleo directo e indirecto", apuntó Marín. A su juicio, constituye una forma de "apostar por la reindustrialización de Gijón y de reaccionar a la brutal reconversión energética a la que nos tienen sometidos los socialistas con la supresión de las térmicas y la desaparición del carbón". En su discurso no faltaron palabras de reproche para la Alcaldesa, Carmen Moriyón. "Lleva varios meses desaparecida, parece que este tema ya no le interesa", apuntó.