Un gijonés declarará esta mañana ante el juez como acusado de haber acuchillado en la cara a su vecina y golpear al marido de ésta porque, según él, le había rayado el coche. El procesado, que compartirá banquillo con su esposa, afronta una pena de cárcel de seis años y nueves meses y el pago de una indemnización por las lesiones causadas que supera los 10.000 euros. No obstante, según el escrito de hechos de la Fiscalía, las desavenencias entre ambos matrimonios ya venía de lejos.

Los hechos encausados tuvieron lugar hace apenas un año, el 5 de septiembre de 2017. Pasaban cinco minutos de las diez de la noche y los procesados fueron en coche hasta el trabajo de sus vecinos para esperarles a la salida. Cuando les vieron salir, el gijonés procesado empezó a golpear violentamente a su vecino mientras le recriminaba que le había rayado el coche. Fruto de la agresión ambos fueron a parar al suelo, momento que aprovechó la esposa del enjuiciado para pegar patadas a su vecino, por lo que se le imputa un delito de lesiones.

El agresor se levantó rápidamente y se fue a por un cuchillo de grandes dimensiones que guardaba en el maletero de su coche y que exhibió ante su víctima al grito de "espera, mira lo que te voy a enseñar". En ese momento, el varón agredido pudo llegar corriendo hasta una panadería cercana para pedir auxilio.

La esposa del agredido, en cambio, se quedó en el lugar y, al final, se llevó la peor parte. El acusado se dirigió hacia ella con el cuchillo y la hirió en la cara y en la oreja izquierda mientras la arrinconaba contra la pared, poniéndole incluso el cuchillo en el cuello, según explica el Ministerio Fiscal. Poco después llegó la Policía Nacional, que procedió a detener al matrimonio agresor.

Fruto de esta disputa entre vecinos, el hombre sufrió varios traumatismos y erosiones en ambos codos así como el esguince del meñique derecho -le quedó una leve deformidad- y artritis postraumática por lo que tardó en curar un mes. Su esposa, sufrió herida por arma blanca en el pabellón auricular y una herida en el dedo índice izquierdo que le dejaron como secuelas varias cicatrices.

Medida de alejamiento

El varón está acusado de dos delitos de lesiones y otro de amenazas por los que afronta seis años y nueve meses de cárcel, mientras que a su mujer le piden un año y nueve meses de cárcel. De ser condenados, deberán indemnizar al matrimonio con 10.920 euros. También les piden la prohibición de acercarse a su víctimas a menos de 200 metros durante cinco años.