La Empresa Municipal de Aguas -tradicional motor inversor en la actividad municipal gijonesa- ha superado por primera vez la cifra de los 30 millones de euros en la suma de sus licitaciones. Esta cuantía se corresponde con los doce contratos aprobados en lo que va de año por la dirección de la empresa, su presidencia -que ostenta la edil forista Ana Braña- o su consejo de administración.

Esta alta cuantía tiene mucho que ver con los proyectos de los pozos de tormenta del Arbeyal y el parque de los Hermanos Castro. El primero, que busca acabar con las inundaciones en la zona oeste, se licitó en 10,7 millones aunque la adjudicación final a FCC Construcciones rebajó la cifra a 7,2 millones. Y el segundo, que supone repetir la tramitación de la obra tras el fracaso de la primera licitación hecha hace años, salió a concurso por 10,2 millones. Su adjudicación está prevista para la próxima semana.

El hecho de que esta tramitación esté inconclusa, por un lado, y una bajada media del 34% en el precio de adjudicación, por otro, hace que la cifra inicial mengue sustancialmente cuando se computa el dinero realmente gastado. Por ahora esa cifra se queda en los 12,9 millones, a la espera de la obra de Hermanos Castro. Desde la EMA, cuya gerencia está en manos del ingeniero Vidal Gago, ese porcentaje de bajada media en la adjudicación es también motivo de satisfacción ya que, aseguran, "está muy por debajo de otros poderes adjudicatarios públicos". Algo que vinculan a "el peso dado en los pliegos a la parte técnica de las ofertas y a la renuencia del equipo directivo de la EMA a admitir las justificaciones de las bajas consideradas temerarias". También se pone en valor que "todas las empresas adjudicatarias tienen su sede social o una delegación permanente en Asturias".

Además de los 21 millones en dos pozos de tormentas, destacan los 7,5 millones en licitaciones vinculadas a la zona rural con actuaciones en el Picu San Martín, Baldornón, Caldones y Fano. En la zona urbana destacan las obras de remodelación de redes en la calle Río de Oro, con un precio de partida de medio millón de euros y una adjudicación que se quedó en 343.465 euros.

Hay otro millón y medio que se reparte en ocho contratos que tienen como objetivo mejorar las instalaciones actuales que tiene la empresa, desde mejoras en la estación de La Perdiz a la adecuación de vestuarios en la depuradora de La Reguerona pasando por un sistema de videovigilancia de su sede central.