Familiares y amigos del montañero gijonés Carlos Álvarez Ramos -fallecido a los 56 años tras caer desde una altura de cien metros mientras realizaba una ruta con su mujer desde Arenas de Cabrales- le dieron el último adiós a "un buen amigo y un hombre prudente y experimentado en la montaña", ayer en el tanatorio de Gijón-Cabueñes. Álvarez Ramos falleció en los Picos de Europa cuando hacía una ruta junto a su esposa, que se recupera de las heridas. En la imagen, un instante de la celebración de la palabra en su honor.