Un gijonés de 30 años declarará esta mañana ante el juez como acusado de haber dejado tuerto del ojo izquierdo a un hombre de 56 años al que le propinó dos puñetazos en la cara tras una disputa en un local de copas de la avenida de Rufo García Rendueles. El procesado se enfrenta ahora a una pena de cárcel de ocho años y al pago de una indemnización de 66.160 euros.

Los hechos enjuiciados tuvieron lugar en enero de 2017. Pasaban treinta minutos de la media noche del día 30 cuando el acusado fue recriminado por los presentes ante su "actitud desconsiderada e inapropiada con la clientela y el servicio que se encontraba en un pub de la avenida de Rufo García Rendueles", explica el escrito de acusación del ministerio fiscal.

Al ser reprendido, el ahora acusado le propinó dos fuertes puñetazos en la cara a uno hombre que allí se encontraba, provocándole el estallido del globo ocular izquierdo. Las secuelas que sufrió la víctima -tras un periodo de curación de 120 días de los que ocho días fueron de hospitalización- fueron la ceguera total del ojo izquierdo, con percepción lumínica únicamente en el polo superior y enoftalmos izquierdo.

La Fiscalía le atribuye un delito de lesiones causantes de la pérdida de un órgano principal por lo que interesa una pena de ocho años de cárcel. En cuanto al pago de indemnizaciones le pide 7.360 euros por los días hospitalizados, 46.600 euros por las secuelas y otros 12.200 euros por el perjuicio estético. Además de otros 2.763,76 euros al Sespa por los gastos médicos generados tras su agresión.