Las apuestas deportivas se han convertido ya en un problema para la población joven. La adicción a este tipo de juegos de azar se ha incrementado de tal manera que los casos detectados se acercan ya al mismo porcentaje de jóvenes afectados por el consumo de cannabis, según confirmaron expertos en adicciones a este periódico.
El perfil del adicto a las apuestas deportivas es el de un varón de entre 20 y 40 años y con cierta capacidad adquisitiva, aunque en los últimos meses se registra un aumento considerable en las consultas informativas entre menores cuya edad se sitúa en un rango de entre los 14 y los 18 años. Son los padres quienes dan la primera voz de alarma al constatar que sus hijos pasan muchas horas con el teléfono móvil. De hecho, la adicción temprana a los smartphones está haciendo que el perfil del apostante se rejuvenezca, tal como explican los expertos. Muchos de los jóvenes que comienzan a padecer problemas de adicción llegan tras haber sufrido ansiedad por juegos en videoconsolas y móviles. "Necesitan tener los mejores jugadores, las mejores cartas, las mejores armas. Necesitan tener evoluciones o mejoras de sus personajes. Muchas veces son los propios padres los que permiten a sus hijos gastar pequeñas cantidades de dinero para conseguir lo que ellos quieren", explica Pablo Fernández, director del Instituto Terapéutico Astur. Con el paso del tiempo, estas personas que antes gastaban cantidades casi insignificantes , de entre uno y cinco euros, van a necesitar cada vez más dinero para saciar su necesidad de apostar. "No estamos diciendo que todo aquel que juega o apuesta vaya a sufrir una adicción, al igual que no todo el que bebe una cerveza termina por tener un problema con la bebida, pero hay que ser conscientes de que muchos de los jóvenes comienzan a edades muy tempranas a tener contacto con este tipo de juegos, incluso cuando su cerebro y madurez se está formando", explica Fernández, quien además anima a quienes crean que puedan tener un problema similar a que acudan a especialistas.
Los jóvenes que sufren este tipo de adicciones enfocan su atención solamente en las apuestas. "Apostar conlleva un control absoluto sobre lo que haces, apuesto y luego estoy esperando a ver si gano o si pierdo; esa incertidumbre hace que las personas estén enganchadas, que sufran con lo que ocurre. En todo momento controlan su móvil, la pantalla de una tableta y además pierden la noción del tiempo," explica el especialista consultado por LA NUEVA ESPAÑA.
Al tratarse de jóvenes e incluso menores de edad, la familia y las personas más cercanas juegan u papel fundamental a la hora de atajar este tipo de problemas. "Hay gente que llega a nuestro centro porque se da cuenta de que su hijo ha perdido la motivación. Dejan de lado los estudios, no controlan sus horarios, no tienen aficiones que antes tenían. Algunos padres no creen que sus hijos tengan un problema, el abuso de los juegos impide que los chicos maduren de una manera correcta y corran el riesgo de acabar siendo adictos al juego", señala Fernández.
Cada vez son más jóvenes los que beben de manera asidua o consumen cannabis habitualmente. En el caso de las apuestas ocurre lo mismo, "estamos viendo que las adicciones que antes comenzaba a los 18 años ahora comienzan a los 14, hay que tener en cuenta que las adicciones no se manifiestan en todas las personas por igual. Puede ser que alguien comience a apostar con 16 años y que la adicción no se haga evidente hasta que cumpla los 30".,
El departamento de Psicología de la Universidad de Oviedo realizó recientemente un estudio desde su Unidad Clínica de Conductas Adictivas, en el que se detallaba que un 13'7 por ciento de los jóvenes de entre 14 y 18 años que juegan con dinero están en riesgo, aunque las cantidades sean moderadas. En el mismo estudio se revela que un total de 564 asturianos están inscritos en el registro de adictos al juego, casi un 20% más que hace un año.
"Hace dos años no existían las llamadas de familias que querían saber cómo ayudar a sus hijos por culpa de la ludopatía derivada del juego online, ahora es habitual atender por teléfono varios casos a la semana", explica el experto.
La adicción a las apuestas ha provocado además un endeudamiento de muchas de estas personas. Cada vez son más habituales las peticiones de micro créditos o créditos rápidos para poder, en unos casos, pagar las deudas que se van a cumulando, y en otros, para poder endeudarse a la hora de jugar. La adicción a las apuestas es vista como una enfermedad por los profesionales habituados a tratar estos temas, aunque denuncian a su vez que la sociedad no los percibe como tal.
Ayer mismo, en una conocida web de búsqueda de empleo, era posible encontrar varias ofertas de trabajo referentes a nuevos locales de apuestas en Gijón, lo que hace pensar que el negocio seguirá creciendo.
Ya en el año 2014 el Ayuntamiento de Gijón preveía casos de ludopatía en edades tempranas en su primer plan municipal estratégico sobre adicciones (2014-2016). Además, el consistorio cuenta con un Consejo Municipal de Adicciones dependiente de la carpeta de Bienestar Social y Participación Ciudadana, que atiende estos casos.
