La Escuela Politécnica de Ingeniería pisa el acelerador a fondo. Un grupo de estudiantes del equipo Wolfast Uniovi ha desarrollado un proyecto industrial y comercial para fabricar motos de competición de pequeña cilindrada en Asturias y venderlas por toda Europa. Además, ha construido la moto de competición desarrollada en el mismo proyecto, co la que participarán en la competición internacional Motostudent que se celebrará desde mañana y hasta el domingoen el circuito de Motorland Aragón.

El equipo Wolfast representará a la Universidad de Oviedo en el V certamen internacional Motostudent, un concurso interuniversitario tiene por objetivo diseñar y construir una moto de competición con unas especificaciones determinadas por un reglamento. La competición tiene dos fases puntuables: una primera fase donde se valora el diseño, la innovación y la posible industrialización del proyecto y una segunda fase que consiste en una carrera real en un circuito del Mundial de MotoGP, reconocida como competición oficial de la Federación Internacional de Motociclismo, y que contará con la piloto Mar Gómez a los mandos de la moto.

La moto que han diseñado los estudiantes, con el partrocinio de un total de 26 empresas, tiene un tamaño y unas prestaciones similares a las de una Pre-Moto3, la categoría inmediatamente inferior a las que compiten en el mundial de velocidad.

Los estudiantes han partido de una serie de especificaciones fijas para todos los equipos, como son el motor, las ruedas y las pinzas de freno, y han diseñado el resto de la moto con piezas propias y algunos componentes comerciales como los discos de freno. La moto se ha fabricado y montado en el Campus de Gijón con la colaboración del Departamento de Construcción e Ingeniería de Fabricación de la Universidad de Oviedo.

Innovación

InnovaciónEn la parte de innovación, tal y como explica la propia Universidad, la moto presenta un novedoso sistema "holeshot" para motos de velocidad que permite comprimir temporalmente las suspensiones de la moto para conseguir una mayor aceleración en la salida de las carreras. El sistema es accionado por el propio piloto en la parrilla de salida tras la vuelta de calentamiento, y no necesita ayuda de un mecánico ni bajarse de la moto. Después, en la primera frenada, el sistema se desactiva y las suspensiones vuelven a funcionar en todo su recorrido. El sistema es "completamente funcional" y "su sencillez y posibilidad de aplicarse a cualquier moto hacen que sea susceptible de poder comercializarse en un futuro cercano", estiman los artífices del invento.

El equipo Wolfast Uniovi está formado por 26 estudiantes (20 chicos y 6 chicas) de la Universidad de Oviedo que proceden de cinco centros distintos (Escuela Politécnica de Ingeniería de Gijón, Facultad de Comercio, Turismo y Ciencias Sociales "Jovellanos", Centro Internacional de Postgrado, Escuela Superior de la Marina Civil y Facultad de Biología). El equipo está tutorado por Álvaro Noriega, profesor del Departamento de Construcción e Ingeniería de Fabricación, y desde que se creó la competición la Universidad ha participado en todas las ediciones previas del concurso con buenos resultados.