Asturias se sitúa como una de las regiones de toda España donde se registran mayores índices de absentismo laboral. Lo hace dentro de un marco ya de por sí malo a nivel nacional tras aumentar en un cinco por ciento el numero de trabajadores que se ausentan de su puesto en horas de trabajo. "Las cifras son crecientes y preocupantes, estamos ante las mayores tasas de los últimos ciclos económicos", explicó ayer en Gijón Francisco Javier Blasco de Luna, director de asesoría jurídica y prevención de riesgos laborales del grupo Adecco, que firma el VII informe sobre absentismo laboral en España en 2017.
Esta situación motivó el año pasado un gasto en España que roza los 76.500 millones de euros, lo que supone un incremento del 10,58 con respecto al ejercicio anterior tras producirse poco más de 4.625.000 bajas por procesos de incapacidad temporal por contingencias comunes (accidente no laboral o enfermedad común), que constituyen el 86,36% del total de procesos -solo el 16,64% vienen motivas por accidentes de trabajo o enfermedades profesionales-. Es aumento, explicó Blasco de Luna, que "se hizo especialmente notable en la zona de la cornisa Cantábrica", con Asturias a la cabeza del país.
La gran mayoría de ausencias por enfermedad se concentran, según este informe, en aquellas relacionadas con infecciones (8,76 bajas por cada 100 trabajadores y una duración media de 8,33 días), trastornos musculoesqueléticos (8,48 procesos y 54,69 días), traumáticos (3,26 procesos y 48,80 días) y psiquiatría (1,68 procesos y 95,65 días). "Muchas de ellas no guardan relación con el entorno laboral", advirtió Blasco durante un desglose del informe a responsables de recursos humanos de empresas asturianas.
Con la crisis económica descendió el absentismo en España, pero la recuperación económica del país ha llevado aparejado el crecimiento del absentismo. Por ejemplo, en lo relativo a los sectores de actividad, la tasa de absentismo es del 5,1% en el sector servicios -iguala su máximo histórico-, del 5,1% en la industria; y del 3,4% en la construcción. Otro de los puntos que pone sobre relieve el informe es que el índice de días de baja "se incrementa considerablemente a medida que aumenta la edad", desvela el documento.
"Medidas reales"
La solución a este problema, puesta ayer sobre la mesa, es la toma de "medidas reales, normativas que permitan un uso eficiente de los recursos públicos de la seguridad social, una apuesta por la gestión de los recursos humanos y dar una mayor flexibilidad horaria que ayuden en la conciliación", explicó el experto.
