Unas de las luces de Navidad colocadas en la calle Uría de Gijón, enfrente de la plazuela de San Miguel, se fue ayer al suelo por culpa del viento y el frío, aunque sin causar daños personales. Operarios de la empresa instaladora subsanaron el incidente poco después. En la imagen superior, las luces colgando del cable sobre el paso de peatones.