"Un lugar abierto a todo el barrio, un punto de unión". Eso es, para los vecinos de Roces, su biblioteca. Una instalación que este año cumple medio siglo y donde ayer se inauguró una exposición para conmemorar la efeméride de la creación de la que fue la primera biblioteca municipal de la ciudad.

"Fue lo máximo", enfatizó Pedro Rubiera, antiguo dirigente vecinal del barrio. Y es que el equipamiento dio "un servicio cultural, de ocio y entretenimiento que en pocos sitios se da", en palabras de Ricardo Onís, actual responsable del centro, que cuenta en la actualidad con más de 19.000 libros y, sumando revistas y discos, casi 24.000 archivos con dos fondos especializados, uno de ellos en Alfonso Camín, que da nombre al equipamiento.

Unos fondos que "fuimos comprando poco a poco, según lo que nos pedían los estudiantes de los institutos", recuerda Armando Rubiera, uno de los impulsores del centro, junto a Carlos Menéndez. "Los chavales no podían comprar los libros así que los comprábamos nosotros por ellos", rememoró Rubiera.

Y es que la biblioteca fue construida de la mano del barrio y creció con él, siendo testigo de sus principales acontecimientos. "Esto daba pena, no había alcantarillado, ni aceras, ni luz", recordó Menéndez. Precisamente, la biblioteca "jugó un papel fundamental para adecentar el barrio y hacerlo un lugar más habitable". Además del fomento de la lectura inherente al equipamiento, se organizaron talleres de corte y confección o encuadernación junto a semanas culturales y cineforums en los que "no cabía la gente".

No solo la cultura tuvo cabida en la biblioteca de Roces. Pedro Rubiera recordó las reuniones políticas clandestinas que se organizaban en el centro, con una persona en la calle "que silbaba si aparecía la policía".

Los primeros años de la Democracia trajeron una época de bonanza para el centro cuando "los políticos estaban para lo que les pedíamos, y no al revés como ahora". Tras una época de impasse en la que estuvo cerca de su cierre -que los vecinos salvaron con movilizaciones llegando a cortar la carretera- la biblioteca vive hoy en día un nuevo renacimiento de cultura y asociacionismo con un lema claro: "integrarse en el barrio y crecer con él".