Un hombre de origen marroquí y de 31 años resultó detenido en la noche del pasado martes cuando transportaba cerca de tres kilos de hachís desde Barcelona hasta Gijón en autobús con paradas dentro de su maleta. El arresto se produjo a la altura de Zaragoza cuando agentes de la Guardia Civil, del servicio cinológico, sorprendieron la mercancía en un control rutinario escondida en una maleta en la bodega del autobús.

Eran las 23.10 horas del martes cuando agentes de la Guardia Civil realizaron una inspección al autobús de línea regular que cubría el trayecto Barcelona-Gijón. Los policías revisaron con ayuda de sus perros la zona de pasajeros y la de las maletas. Fue ahí, en la bodega, cuando un perro marcó uno de los bultos. El olfato acertó. Los agentes revisaron la maleta, en presencia de su dueño, y encontraron una caja de zapatos deportivos, envuelta en papel film. Contenía varios paquetes con el mismo envoltorio, que cubría una sustancia marrón. Resultó ser hachís, en concreto 23 tabletas y 50 bellotas que en total pesaban 2.820 gramos.

El dueño de la maleta, de 31 años, fue detenido por la presunta comisión de un delito contra la salud pública.