Cuanto aprieta el frío y se acortan los días, nada mejor que reunirse para hacer fiesta con los frutos del otoño. Es la máxima que se han aplicado este fin de semana varias asociaciones de vecinos de otras tantas localidades gijonesas inmersas estos días en celebraciones tradicionales, con las castañas y la sidra dulce como protagonistas.

Los alumnos del colegio Patronato de San José fueron de los primeros en celebrar su magüestu en las instalaciones del centro, con trajes tradicionales, bailes, representaciones y una buena pitanza para rematar la jornada, en la que participó toda la comunidad educativa a lo largo de la mañana del pasado jueves.

En Baldornón los vecinos también se juntaron el fin de semana para dar buena cuenta de las castañas asadas acompañadas de sidra dulce, al igual que hicieron en la vecina parroquia de Granda. En el local social se juntaron decenas de personas, con gran afluencia de público infantil, para disfrutar de una velada tradicional que se repite cada año por estas fechas.

También en clave tradicional se reunieron los residentes en Somió para celebrar su magüestu, que estuvo aderezado además por una de las tradiciones antaño más arraigadas en los pueblos en esta época: la esfoyaza. Los asistentes pudieron deshojar las mazorcas y enristrarlas al modo tradicional, antes de la comida y la música.