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Ultimátum sobre la Casa Sindical: o se limpia y se arregla en un mes o el Ayuntamiento la cierra

Se requiere al Ministerio de Trabajo la retirada de los enseres del salón de actos, solventar los fallos del inmueble y legalizar las actividades que acoge

La fachada de la Casa Sindical, en Sanz Crespo. MARCOS LEÓN

Han sido meses de ir y venir de informes y alegaciones entre Gijón y Madrid pero ya hay un ultimátum sobre la mesa: el Ayuntamiento le ha dado un mes de plazo al Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social para la "retirada inmediata" de todos los enseres que hay en el salón de actos de la Casa Sindical, la adopción de las medidas necesarias para solventar los problemas de seguridad, salubridad y ornato público detectados por los técnicos municipales en todo el inmueble y presentar la documentación necesaria para legalizar las actividades que se están desarrollando en el inmueble "bajo apercibimiento de incoación de expediente sancionador con imposición de las multas pertinentes".

Si transcurrido ese plazo se comprobase el incumplimiento de lo ordenado "se procederá de inmediato a decretar la clausura del edificio impidiendo el uso del mismo". Así lo establece la resolución firmada hace unos días por la directora general de TeCrea, Purificación García. El plazo del mes empieza a contar tras la recepción de la notificación.

Esta resolución remata, por ahora, un denso expediente municipal que tiene como punto de partida una iniciativa del Grupo Municipal Ciudadanos que en marzo de este año solicitaba en comisión la elaboración de un informe sobre la situación de un inmueble, cuyo estado de deterioro es más que evidente. La Sindical, como se la conoce popularmente, se construyó en 1965, es propiedad del ministerio y alberga las sedes locales de los sindicatos Comisiones Obreras (CC OO), Corriente Sindical d'Izquierda (CSI), Confederación Nacional del Trabajo (CNT) y la Confederación General del Trabajo (CGT).

Los informes emitidos en junio por técnicos municipales desvelaron graves problemas de salubridad y accesibilidad pero, sobre todo, de seguridad. No solo se alertó de peligros de incendio y la existencia de una instalación eléctrica de alto riego. También se puso en evidencia el uso irregular de espacios. Por ejemplo con actividades recreativas no autorizadas en la denominada Casa del Pueblo aunque el problema se centró en la conversión del salón de un actos en un rastrillo con una peligrosa acumulación de materiales de todo tipo. A partir de estos informes, el Ayuntamiento inició un expediente de orden de ejecución sobre el titular del inmueble y los sindicatos usuarios para que se hiciera la revisión y limpieza del inmueble, se retiraran los enseres acumulados y se legalizaran las actividades que se hacen en su interior. Respondieron a ese escrito Comisiones Obreras, CSI y el propio Ministerio.

Comisiones reivindicó entonces el cumplimiento de sus obligaciones en los espacios que tiene reservados y matizó que el salón de actos es un espacio de uso común que ha sido ocupado por "la vía de hecho, sin autorización y sin derecho por la organización Corriente Sindical de Izquierdas" por lo que no se hacen responsables de su uso indebido. En cuanto a las obras de rehabilitación considera que son competencia del Ministerio.

A las obligaciones del Ministerio también hace mención la CSI en sus alegaciones aunque entienden que de los informes técnicos no se desprenden problemas estructurales que pongan en riesgo la seguridad de sus ocupantes y de las personas que transitan por el exterior de la Sindical. Matizan que no son responsables del salón de actos y dejan claro que su usuarios es la Asociación Asturiana para el Fomento de la Economía Social y Solidaria y que de la actividad que allí se realiza como mercadillo es conocedor el Ayuntamiento, que tiene un convenio de colaboración con esa entidad. A mayores, recuerdan desde la Corriente, el equipo de gobierno de Foro se comprometió a buscar una ubicación alternativa para la actividad de esa entidad.

La última inspección

La última inspecciónEl escrito enviado por el Ministerio el Ayuntamiento es para notificar que ha dado un mes de plazo a la CSI para cumplir con el mandato municipal y que si el sindicato no lo hace, lo hará él. Eso fue el 25 de julio. Pero el expediente municipal sobre el asunto incluye el resultado de una inspección realizada el 23 de octubre por técnicos del servicio de licencias y disciplinas. "La actividad de rastrillo sigue realizándose y no se han retirado los objetos almacenados en dicho espacio", dicen.

A este informe se suma otro, el 5 de noviembre, del arquitecto municipal de la Dirección General de TeCrea que deja claro que ninguno de los escritos recibidos plantea cuestiones de carácter técnico y se limitan a cuestiones internas entre propietario e inquilinos y convenios de una asociación "por lo que no procede nuevo informe técnico al respecto". Se explica en este informe que la única cuestión relativa al uso se incluye en las alegaciones de la CSI y tiene que ver con labores realizadas de redistribución de los enseres almacenados en el salón de actos del edificio para permitir el paso de personas. "No consta que se haya presentado ninguna solicitud de licencia para el cambio de uso del local del salón de actos para adaptarlo al uso pretendido, por lo que no procede informe favorable", se explica después.

De la suma de todos estos antecedentes surge la actual orden municipal al Ministerio de Trabajo y la posibilidad, cierta, del cierre de la Sindical tras más de medio siglo de actividad en el corazón de Gijón.

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