En viviendas de barrios y parroquias de Gijón hay ahora mismo 8.988 personas mayores de 80 años viviendo solas, 2.244 de ellas sobrepasan ya los noventa años. Son el 20% de los 44.504 gijoneses que viven solos, según un informe municipal presentado en comisión en respuesta a una pregunta del Partido Popular.
Su portavoz, Pablo González, publicitaba ayer estos datos poniendo especial énfasis en la necesidad de atención a esos mayores. El planteamiento de los populares es que la administración, y más en concreto la administración municipal, lidere toda una red de protección y apoyo a los mayores que viven en soledad. "Jamás veremos a estas personas reivindicar una política social para ellos. No hacen ruido, no se movilizan como otros colectivos. Necesitan ayuda pero no la piden", sentenciaba el munícipe para justificar la necesidad de priorizar desde el Ayuntamiento políticas dirigidas a este colectivo.
Un colectivo con preponderancia de mujeres, que son el 80% del total. Por franjas, el estudio registra 6.744 gijoneses de entre 80 y 89 años que viven en soledad: 1.350 hombres y 5.394 mujeres. Mayores de 90 son 2.244: 398 hombres y 1.846 mujeres. Estos son los grupos más vulnerables pero hay otros datos de interés y que demuestran el alto nivel de presencia de la soledad en una población cada vez más envejecida. Viven solos 6.566 septuagenarios: 1.792 hombres y 4.774 mujeres. Eso sí, el grupo de edad con más preponderancia de domicilios con una sola persona es el que va de los 40 a los 49 años. Son 4.517 hombres y 2.878 mujeres. Un total de 7.395 personas y con un cambio de sentido de género en la estadística. Al otro lado de la balanza están los menores de 19 años. En Gijón viven solos 106.
Prevenir patologías físicas y psíquicas
Pero es sobre los mayores de 80 años donde el PP entiende que hay que actuar para vigilar su situación y prevenir el desarrollo de patologías físicas y psíquicas vinculadas a la soledad. Sobre todo si es una soledad no elegida libremente. El Grupo Municipal Popular ha decidido promover el desarrollo de una reunión extraordinaria y monográfica del Consejo sectorial de Personas Mayores de Gijón para que en este foro se pueda elaborar un informe con medidas de actuación , que se elevaría a posterior debate y aprobación en el Pleno. La idea es que ese estudio ayude a los concejales a "tomar las decisiones oportunas para enfrentar esta coyuntura".
El PP ya tiene algunas ideas que aportar a esa reflexión conjunta y que parten, en todo caso, de un compromiso de los servicios sociales de la administración pero coordinados con las familias como pilar básico de toda la operación. A partir de ese protagonismo de la familia -quien la tenga- cabría la opción de desarrollar toda una red de protección y vigilancia donde se posicionarían, por ejemplo, los centros de salud o los comercios de proximidad. Desde allí se podría controlar el día a día de esos mayores solitarios. El PP también aboga por involucrar a los centros educativos a través de proyectos de voluntariado social.
Pero no se trata solo de vigilar. El PP sugiere también programas que potencien la socialización tanto entre los mayores como entre mayores y jóvenes con "una oferta inteligente" de actividades sociales y culturales. Y reivindica una especial atención para los mayores de la zona rural que por sus circunstancias pueden estar más desprotegidos.
En cualquier caso, y defendiendo la libertad de cada cual de vivir en soledad, los populares reivindican opciones de vigilancia y seguimiento "no invasivos" que se consiguen con las nuevas tecnologías. "No pasa nada si no la quieren pero hay que ofrecer esa ayuda", dijo González.
El objetivo fundamental del PP es poder ir más allá de la realidad actual donde la propuesta de apoyo a los mayores, desde la Fundación de Servicios Sociales, se sustancia en la teleasistencia y la ayuda a domicilio. El año pasado, según la memoria de la Fundación, el servicio de teleasistencia llegó a 3.008 personas y a unas 1.700 la ayuda a domicilio en todo el año. La cifra final fue de 1.141 en diciembre. Algo más de 4.000 beneficiarios de dos servicios para mayores en general frente a los cerca de 9.000 sólo del colectivo de solitario.
