La gijonesa Lorena Gil Álvarez será la candidata de Podemos a la presidencia del Principado en las elecciones autonómicas que se celebrarán el próximo mes de mayo. Gil, actualmente diputada autonómica por la formación morada, cargo con el que se estrenó en el territorio de la política tras una trayectoria profesional en el mundo empresarial en España y Alemania, es mujer de palabra: domina cuatro idiomas y atesora conocimientos de otros dos.
Con 43 años y soltera, vive en el barrio gijonés de El Coto, donde se encuentra a gusto y sigue habitando, con independencia de la responsabilidad que le encomienden los asturianos en los próximos comicios autonómicos. El Coto es lugar ligado a su trayectoria vital desde mucho antes.
Lorena Gil, la mayor de dos hermanas, pasó su infancia y adolescencia en el domicilio familiar, en la zona de Zarracina. Estudió Secundaria en el Instituto Calderón de la Barca, tras haber cursado primaria en el Colegio Jovellanos. En ese instituto entabló amistad con otra de las dirigentes de Podemos en Asturias, la concejala gijonesa Nuria Rodríguez.
Aunque nació en Gijón, la candidata de Podemos tiene sus raíces en un concejo vecino. En su infancia y adolescencia no hubo fin de semana ni vacaciones veraniegas que no acudiera junto a su hermana a la casa de aldea de sus abuelos maternos en Candanal (Villaviciosa). A esa vivienda sigue regresando con frecuencia para desconectar. Caminar o pasear en bici cerca de la playa es algo que también valora, además de pasar tiempo con su sobrino.
Quienes la conocen más de cerca resaltan de ella que aunque a primera vista parece una persona muy seria, goza de un gran sentido del humor y que su trato en corto es amable y cercano. Su gran capacidad para escuchar y para organizar, además de su tendencia natural al trabajo en equipo, son facetas que resaltan algunos de los que mejor la conocen.
Con gran facilidad para el aprendizaje de idiomas, estudió Filología Anglogermánica en la Universidad de Oviedo, completando la formación el último curso de la carrera en la Universidad de Bonn (Alemania), antes de obtener el certificado pedagógico en Oviedo. Aunque durante su época de estudiante impartió clases particulares, en algunos casos sin cobrar a niños de familias desfavorecidas, sus derroteros profesionales no iban a orientarse por el mundo de la enseñanza.
Con dominio del inglés, francés, alemán y español, además de conocimientos de italiano y catalán, su futuro estaba en otro lugar. Da la casualidad de que no aprendió catalán en España, sino durante su estancia en la universidad de Bonn, un idioma por el que optó al tratarse de una lengua románica y ante la perspectiva de poder encontrar empleo en Cataluña.
Realizó prácticas en el Bundestag (el Parlamento alemán) justo en el año en que esta institución se trasladaba de Bonn a Berlín tras la reunificación de Alemania; su primer empleo fue en Esmena, donde al poco de llegar se incorporó al departamento de logística e internacional.
Después de tres años en esa empresa gijonesa, se incorporó al Instituto Español de Comercio Exterior con una beca de internacionalización, con la que fue destinada un año al consulado español en Dusseldorf (Alemania). Al año siguiente trabajó en la sede central de Icex, en Madrid, para su departamento de industrias culturales, donde mantuvo contactos con el sector audiovisual y editorial.
El cine es una de sus pasiones. Durante años trabajó de manera temporal para el Festival Internacional de Cine de Gijón, atendiendo a los invitados internacionales al certamen. Una labor que compaginó con su tarea profesional, reservándose siempre vacaciones para las fechas en las que se celebra el certamen y así siguió colaborando durante años con la organización. Desde 2005 trabaja para Du Pont, en el área de recursos humanos. Está en excedencia de ese empleo por su actual cargo de diputada autonómica. Su labor política le ha restado tiempo para otras de sus pasiones, la lectura y los viajes.
Mientras trabajaba se licenció en Ciencias Políticas por la UNED, pero su primer interés por la política era a nivel académico, como objeto de análisis. El surgimiento de Podemos la hizo lanzarse a la acción, primero colaborando con el grupo de cultura que la organización creó en Gijón, para pasar a involucrarse más activamente después. En 2015 pasa a formar parte del Consejo Ciudadano autonómico como responsable de nuevo modelo productivo, cargo que ocupa junto al institucional en la Junta General del Principado.
Es socia de varias organizaciones de ayuda a refugiados y también forma parte del Real Grupo de Cultura Covadonga junto a su hermana desde que eran crías, donde acude a clases de pilates. Antes disfrutó de otras especialidades, como la gimnasia rítmica y el balonmano. También practicó al "rounders", un juego tradicional similar al béisbol, durante una estancia en Irlanda.
